El Fútbol Club Barcelona vivió una auténtica revolución el pasado verano. A base de palancas saltó por encima de su crisis económica y realizó numerosos fichajes que le han valido para ser campeón de LaLiga –lo es virtualmente–. Sin embargo, tal importante paso se queda corto respecto a lo que realmente quieren conseguir: volver a brillar en Europa.
Es una obsesión sí. Los encadenados fracasos en Champions League aprietan al presidente Joan Laporta y a su equipo para hacer algo. Mientras el Caso Negreira les aprieta desde los juzgados, en el Barça trabajan en soluciones milagrosas. Ya no caben más palancas, al menos no de las de vender activos, y ahora toca encontrar nuevas fórmulas con las que convencer a quienes deben dar luz verde a sus cuentas –y a sus fichajes–.
Ese es el principal problema. Superado el límite salarial en unos 200 millones de euros, hace tiempo que el FC Barcelona está en conversaciones con LaLiga para alcanzar un entendimiento y poder moverse en el mercado con libertad. ¿Qué ocurre? Que este organismo y su presidente, Javier Tebas, no están por la labor.
Ciñéndose a lo establecido en las normas, LaLiga ha invitado a los culés a vender jugadores y reducir el gasto en sueldos como única medida para poder reforzarse como desea. El problema está claro; si lo que quieren es mejorar el equipo, ¿cómo hacerlo vendiendo? Justo por esta cuestión, Laporta ha planteado varias ideas a la mencionada competición, pero ésta no le cree por el momento, o al menos no le compra su plan.
Esa es exactamente la información que maneja Fabrizio Romano. El reconocido informador asegura que LaLiga no ha dado luz verde a los blaugranas al entender que el plan que plantean es "muy complicado"; tanto como para que no se pueda aprobar incluso estando en juego el fichaje estrella de Laporta: Leo Messi.
A estas alturas de la película es un secreto a voces que Leo Messi va a abandonar el Paris Saint-Germain y que no le importaría lo más mínimo volver a Barcelona, a su casa. En su predisposición a que ocurra se incluye aceptar un salario por debajo de su caché, pero ni por esas salen las cuentas.
Si se tratase solo de traer a Messi al equipo, quizás LaLiga podría abrir algo la mano, pero no es así. En la planificación del Barcelona se incluye contar con el registro de nuevos contratos como el del renovado Gavi o el que será un recién llegado en julio, Iñigo Martínez.
Obviamente estamos aún en mayo y hay tiempo, pero no demasiado. Desde diversos medios como Relevo se ha hablado ya de que a los culés se le pueden escapar fichajes por su situación económica. Sin ir más lejos, Gundogan y Vitor Roque, dos de los pretendidos, no terminan de llegar por este motivo. Urge encontrar soluciones y que Laporta convenza a Javier Tebas.