Va camino de convertirse en el culebrón del mercado de invierno. Ansu Fati no quiere salir y Hansi Flick y la dirección deportiva culé no dejan de abrirle la puerta, tanto públicamente como con hechos.
Ansu Fati, sin embargo, aboga por el momento por acabar la temporada como azulgrana, algo que choca frontalmente con los planes de Flick, quien ya le ha dejado claro que no tiene sitio en su plantel para la segunda mitad del curso, y de Laporta y Deco, que necesitan aligerar masa salarial para tratar de reforzar al plantel en esta ventana de transferencias. El adiós de Ansu Fati parece obligado.
Ahí sigue el asunto, enquistado y con visos de no solucionarse el problema hasta el propio cierre del mercado, que en este 2025 será el próximo 3 de febrero. En el triunfo por 7-1 ante el Valencia, tampoco extrañó su ausencia, con el partido prácticamente sentenciado desde el minuto 25 del mismo, cuando los azulgranas ya ganaban por 3-0. Era un día perfecto para darle minutos al internacional español, junto a otros menos habituales. De hecho, el técnico alemán le brindó la oportunidad a futbolistas como Gerard Martín, Pablo Torre y Pau Víctor. Sin embargo, Ansu Fati se quedó en el banquillo.
Nada raro, por otro lado, pues en este 2025 tan sólo ha participado media hora de juego en los ocho partidos oficiales que acumula el FC Barcelona entre todas las competiciones. De hecho, fue en Copa del Rey, ante el Barbastro, donde ni siquiera partió como titular.
No es ninguna mentira la rotunda afirmación de que Hansi Flick no cuenta con Ansu Fati. En el club quieren que se vaya en enero, por lo que con la mayor educación posible y siempre de la legalidad, le están pidiendo formalmente que se marche. Ansu, de momento, se aferra a su contrato firmado, hasta 2027 y con un salario elevadísimo en relación a su rendimiento. De hecho, es totalmente inaudible por cualquier otro club de Primera división al que pudiera interesar el futbolista.
La estrategia es clara por ambas partes. Por un lado, el conjunto culé trata de que salga para liberar masa salarial y poder traer algún refuerzo, siendo Rashford la primera opción en la hoja de ruta culé. Ansu Fati y su entorno se deciden, mientras tanto, se resisten, aludiendo al manido discurso de quedarse y luchar por un sitio, demostrando que tiene cabida en el actual FC Barcelona. Un absoluto paraguas para seguir ganando tiempo y conseguir mejores condiciones en su salida, la cual posiblemente se acabe realizando en las últimas horas de mercado. Si finalmente acaba la temporada en ‘Can Barça’, todos coinciden en que sería un craso error por parte de Ansu Fati, quien de partida necesita jugar para tratar de recuperar ritmo, algo que se le niega en el Barça.