Peloteros sigue con su labor solidaria y se vuelca ahora con Las 3.000 Viviendas

Peloteros sigue con su labor solidaria y se vuelca ahora con Las 3.000 Viviendas
- Redacción Sevilla
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 2 min lectura
La Escuela Peloteros de la Sierra Sur no cesa en su labor formativa a todos los niveles, incluyendo muy a menudo acciones de carácter solidario para enseñar a los niños de la comarca que no solamente con el fútbol se crece y se aprende, sino también siendo mejores personas. Y nada mejor que demostrarlo con los menos favorecidos. En esta ocasión, la institución que dirige José Luis Pérez Mena acaba de contraer un acuerdo de colaboración con la Fundación Alalá, esa organización que naciera hace ocho años por obra y gracia del guitarrista Emilio Caracafé para contribuir a la integración de niños en riesgo de exclusión social.

Entonces, se consiguió que rostros conocidos de la sociedad sevillana y andaluza, como el humorista César Cadaval (la mitad del dúo 'Los Morancos'), el cantante José Manuel Soto, el empresario Rosauro Varo o los toreros El Litri y Francisco Rivera Ordóñez, se implicaran en el patronazgo, desarrollando en todo este tiempo una labor encomiable en las Tres Mil Viviendas y otras zonas desfavorecidas, también en Jerez de la Frontera. Alalá, alegría en caló, cuenta también con una rama futbolística, pues ha puesto en marcha tres equipos que compiten la Liga IMD (uno benjamín y uno juvenil), más otro prebenjamín en la provincia vecina.

En ellos se ha volcado Peloteros y su programa de ayuda a los más necesitados. En primer lugar, ya se ha producido una primera entrega de material deportivo, que consta de equipaciones, petos, balones, conos, carpetas y pizarras para entrenadores... Posteriormente, en el mes de marzo de 2022, se celebrará una jornada de convivencia en el albergue El Peñón de Algámitas, donde los más pequeños disfrutarán de una experiencia inolvidable, con actividades de montaña, cuidado y monta de caballos, saltos en tirolinas, tiro con arco y multiaventura, además de la clásica comida de confraternización con los niños de la escuela de la Sierra Sur, que les devolverán la visita en mayor del año próximo.