Tanto
Sevilla FC como
Real Betis están inmersos en la planificación de la próxima temporada, estando aún en el aire la finalización de la actual y, por tanto, también su tesorería. La pandemia del Covid-19 ha generado una crisis sanitaria y otra en lo económico que ha afectado de lleno al mundo del fútbol, cuya burbuja se sostiene principalmente por los ingresos por televisión. De ahí que no sea de extrañar que a los clubes de LaLiga hayan llegado ya los ERTE y las rebajas salariales, a los que ya se han acogido Sevilla FC y Real Betis, respectivamente.
Al margen de ello, el día a día sigue tanto en Nervión como Heliópolis y sus direcciones deportivas
trabajan en la configuración de sus plantillas para la 20/21, temporada en la que ambos conjuntos hispalenses comparten un denominador común:
su necesidad de reforzar la portería.
En el Sánchez-Pizjuán no ejercerán la opción de compra por valor de cuatro millones de la que disponen sobre
Bono, por lo que es necesario firmar a otro arquero que le dispute el puesto de tú a tú a un
Tomas Vaclik que, por otro lado, afrontaría
su último año de contrato, una vez que la futura temporada comience.
Algo similar a lo que ocurre en el Benito Villamarín, donde este curso se ha venido echando de menos a
Pau López, una vez que el joven
Dani Martín haya demostrado estar aún muy verde y
Joel Robles haya alternado actuaciones muy destacadas con otras menos brillantes, lo que no le ha privado de su titularidad, al no contar, prácticamente, con competencia real bajo palos.
En este contexto, lógicamente, ha surgido el nombre del guardameta del Levante UD
Aitor Fernández, quien es el arquero de LaLiga que
más paradas ha realizado hasta la fecha y quien viene cuajando una temporada muy destacada, defendiendo la portería granota. Un arquero al que tanto el Sevilla FC como el Betis viene siguiendo muy de cerca, tal y como
ESTADIO Deportivo ha podido confirmar.
Pese a ello,
no se trataría de una operación sencilla para ninguno de los dos clubes. O más bien barata, pues el 'feeling' por parte de Aitor Fernández, tanto con Betis como con Sevilla FC,
es recíproco, tal y como ha podido conocer este diario por fuentes muy próximas al portero, de 28 años de edad y natural de Arrasate.
"Son porterías muy interesantes para Aitor", reconocen a
ED, al igual que también lo serían, por ejemplo, la del
Athletic Club o la
Real Sociedad.
El principal problema, lógicamente, estaría en el Levante, que recientemente
renovó al arquero hasta 2023 en un movimiento que, a diferencia de lo que pudiera pensarse, se correspondió más a
una adecuación del salario de éste a la categoría y a su rendimiento bajo palos en Primera división. Mejora con la que su cláusula, además, ascendió de los 25 a los
30 millones de euros.
Una elevada cantidad a la que, tal y como aseguran a este diario, no sería necesario llegar para hacerse con los servicios de Aitor, aunque los clubes interesados estarían obligados a negociar con el Levante y su presidente, un
Quico Catalán con el que no es especialmente fácil hacerlo.
El que no sea necesario acudir a su cláusula, sin embargo, no quiere decir que acabe resultando una operación barata, pues el Levante ya compensó su déficit económico el pasado mercado invernal, con las ventas de
Cabaco y Oier; unos
10 millones de euros que llegaron a sus arcas como absolución definitiva para el 'Fair Play' financiero. Lo que ahora no le obliga a realizar ningún movimiento a un Levante que no tiene esa necesidad económica de meses atrás.
Es decir, que difícilmente (a no ser que el Covid-19 y sus consecuencias financieras se empeñen en demostrar lo contrario) Aitor Fernández saldrá este verano del Levante por
diez millones de euros o menos, algo que en el pasado mercado habría sido bastante factible de haberse concretado una oferta.
Sin movimientos oficialesPese a todo ello, cabe destacar que las fuentes consultadas por
ED aseguran que, hasta el momento,
ni Betis ni Sevilla FC han realizado ningún movimiento formal por el arquero, a pesar de que el propio Aitor Fernández es consciente de que
tiene mercado en España y que está siendo observado por ambos conjuntos, entre otros.
La situación actual del fútbol tampoco invita a dar pasos en falso, por lo que tampoco es de extrañar. Pese a ello, se esperan movimientos en las porterías de LaLiga una vez que el vendaval de la crisis amaine.
El hoy arquero granota, por su parte, está
abierto a que estos lleguen y se le presente en un futuro cercano una posibilidad de seguir creciendo en lo deportivo como profesional,
a pesar de estar muy feliz en el Levante, donde este curso ha rendido a un gran nivel.