Las intimidaciones que Dani Alves está sufriendo en la cárcel de Brians 2

Acabada la novedad de verle allí, al parecer, el futbolista brasileño está siendo gravemente insultado por los presos cuando camina por los pasillos de la prisión o está sentado en el comedor

Las intimidaciones que Dani Alves está sufriendo en la cárcel de Brians 2
Dani Alves, mientras jugaba con el Pumas. - Twitter / Pumas
Alberto GálvezAlberto Gálvez 3 min lectura

Mientras Cristóbal Martell continúa estudiando las maneras de sacarle de la cárcel y preparando un juicio que no termina de llegar, Dani Alves parece que ya ha comenzado a vivir los verdaderos horrores de estar en prisión. Acabada la novedad de verle por allí y una vez firmadas todas las camisetas que le solicitaban y con las que un preso hizo hasta negocio, el exjugador del FC Barcelona está pasando los momentos más difíciles entre las rejas de Brians 2.

Así, mientras fuera se desarrolla el juicio por su presunta violación el pasado diciembre en una conocida discoteca de Barcelona, el futbolista dentro está siendo insultado gravemente por otros presos. Al menos, así lo ha contado en el programa Fiesta de Telecinco un compañero de prisión suyo, quien ha dado todo tipo de detalles sobre el día a día del jugador en las instalaciones de la cárcel catalana.

Según dicho testimonio, el que fuera jugador del Sevilla y Juventus, entre otros, intenta pasar desapercibido, pero no lo consigue: "Él está ahí perdido y todo el mundo '¡ay, el Alves!', '¡ay, el Alves!'. También hay gente maleducada y en el comedor cuando todo el mundo está comiendo, pegan en el cristal y le dicen: '¡Tú, maricón! ¡Violador!'".

Asimismo, confiesa esta fuente que el jugador ha perdido peso en estos meses y que psicológicamente está ya muy afectado: "Está más delgado, más demacrado. Se le ve triste a ratos". Eso sí, el testimonio consultado por Fiesta ha aseverado que "alguna vez" el futbolista sí tiene "privilegios" en su estancia en prisión.

Y mientras unos le insultan, otros se interesan por acercarse a él e intentan saber qué es lo que realmente pasó en dicha en los baños de aquella discoteca. Y él insiste en que es inocente: "Dice que todo ha sido consentido, que todo fue bien. Una noche de fiesta". Precisamente, estas palabras son muy similares a las que mantuvo Alves en su última versión en los juzgados, asegurando que no hubo violación y que inicialmente lo ocultó para no desvelar su infidelidad.

Por último, este testimonio ha confirmado que el brasileño sigue jugando al fútbol cada vez que puede y que no hace muchas cosas más para entretenerse: "Él no sale. Él solamente sale al polideportivo cuando juega contra otro módulo. Si no, se queda ahí en el módulo o se pone ahí en la sala de día, que está la tele, a verla".