Dani Alves vivió 430 en prisión por la agresión sexual a una joven en una discoteca de Barcelona, algo por lo que fue condenado, aunque todavía no existe sentencia definitiva. El brasileño salió en libertad al pagar un millón de euros de fianza y ahora vive una nueva vida, sin equipo de fútbol que le quiere, pero con el amor de Joana Sanz, con la que se ha reconciliado. El ex del PSG, Barça o Juventus, entre otros, espera la resolución de los recursos presentados, los cuales podrían dejarlo en libertad para siempre o volverle a llevar a prisión.
Mientras la justicia sigue su curso y se espera conocer qué pasa con esos recursos, Alves debe acudir cada viernes a la Audiencia de Barcelona para firmar ante el juez, una cita a la que Joana Sanz aún no le ha acompañado, pero ambos han estado mostrando que su relación va mejor que nunca. De hecho, la modelo anunció que se mudaba a Tenerife, su tierra natal, donde seguramente le acompañe Alves.
Pese a o lo bien que va todo para el brasileño, su vida podría volver a dar un vuelco debido al conflicto que mantiene con su exmujer y exrepresentante, Dinorah Santana. Alves y ella mantienen una pelea porque Dinorah le acusa de apartarla de una de sus empresas. Es más, la exmujer del futbolista le habría amenazado con contar sus trapos sucios, lo que dejaría en muy mal lugar, cuando Dani, uno de los dos hijos que tienen en común, cumpliera los 18 años de edad.
El conflicto entre ambos no queda ahí, puesto que Dinorah también estaría preparando con sus abogados una denuncia contra Dani Alves, la cual se presentaría cuando la hija de ambos, Victoria, cumpliera la mayoría de edad. Si tenemos en cuenta que la niña nació el 27 de octubre de 2007, en poco más de un año Alves podría verse otra vez en el banquillo de los acusados.
"Para mí no existe, para mí ha muerto", dijo hace unos meses Dinorah Santana, quien en un principio era la única que visitaba a Alves en la cárcel. La brasileña denunció que el futbolista se quiso aprovechar de ella y sus hijos cuando entró en prisión, usando el supuesto arraigo familiar para solicitar la libertad condicional. "Pretendían, gracias a ese apoyo, conseguir la libertad condicional escudándose en el arraigo familiar, me decían lo que tenía que decir a través de un grupo de WhatsApp... Después no ha querido saber nada y son sus hijos", llegó a decir la brasileña.
Después de estas acusaciones hechas por Dinorah en los medios, Alves anunció que tomaría medidas legales, aunque la demanda contra su exmujer nunca llegó a presentarse. Ahora sería ella la que estaría trabajando para volver a llevar a Dani Alves ante la justicia.