Este miércoles, se han producido novedades en el ‘caso Negreira’, en el que se investigan los supuestos pagos del FC Barcelona durante años al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira. A pesar de que, en los últimos tiempos, el cuadro de la Ciudad Condal ha logrado algunas ‘victorias’ en este asunto, dos de sus expresidentes han sufrido un duro revés. Este es el ejemplo de Sandro Rosell y Josep María Bartomeu, los predecesores de Joan Laporta, quien ostenta en estos momentos el bastón de mando en el Camp Nou.
El titular del Juzgado de Instrucción número uno de Barcelona, Joaquín Aguirre, ha decidido citar como imputados a los antiguos máximos mandatarios en el marco de esta investigación. No solo a ellos, ya que también ha llamado al hijo de Negreira y a los exdirigentes de la entidad de la Ciudad Condal, Albert Soler y Óscar Grau. A pesar de que todavía no se ha puesto fecha para las testificales, tal y como recoge El Mundo, se amplía de esta forma el marco de personas para comparecer ante el juez. No hay que olvidar que el único en ponerse frente al magistrado ha sido el propio Enríquez Negreira, quien se acogió a su derecho a no declarar.
En las últimas semanas, se confirmó que, tanto el actual presidente como la que fue su Junta Directiva en su primera etapa al frente del Barça fueron descartados de cometer delitos como cohecho o blanqueo de capitales. No solo eso, ya que Laporta fue exculpado, ya que se consideró que los pagos realizados a Negreira habrían prescrito. Además, se le retiró la imputación la entidad.
Eso sí, no se ha cerrado el caso, ya que se siguen investigando otro tipo de delitos. Estos serían los de corrupción deportiva o falsedad. Esto se ha producido después de que quedara probado que el club hubiera pagado 8 millones de euros durante 20 años a uno de los hombres más poderosos del estamento arbitral.