El pívot checo del Baloncesto Sevilla
Ondrej Balvin ha comentado hoy que "cada partido es importante, no en particular" el que su equipo disputa el sábado en Fuenlabrada, que tildó de "muy difícil, sobre todo porque ellos en casa están bien".
El baloncestista recordó a los periodistas, tras participar en un acto comercial junto al presidente del club hispalense, Fernando Moral, que los fuenlabreños son "un rival directo" que cuentan con la ventaja de tener a un entrenador, el croata
Zan Tabak, que "conoce muy bien" al rival pues trabajó en Sevilla.
Balvin lamentó que el conjunto andaluz aún no conozca la victoria en la
Liga Endesa tras cuatro jornadas disputadas, lo que achaca a "una serie de errores en momentos puntuales", pero aseguró que "el equipo va a más" y está "capacitado para lograr el primer triunfo ya".
"Estamos trabajando para ello. Los que llevamos más tiempo aquí estamos ayudando a los nuevos para que hagan mejor las cosas.
Luis Casimiro -técnico del CB Sevilla- nos dice que hagamos las cosas que mejor hace cada uno e insiste en que haciendo una buena defensa, haces luego un buen ataque", explicó.
Por eso, el jugador centroeuropeo cree que "el apartado defensivo hay que trabajarlo más pero también hay que recordar que los rivales han estado hasta ahora muy bien en ataque" a pesar de que el Baloncesto Sevilla les ha "imprimido un alto ritmo defensivo".
Balvin admitió que "los más frustrados" son "los jugadores que ya" vivieron "esta situación el año pasado" y espera que "los nuevos se amolden a esta liga" para que "el equipo empiece a ganar partidos".
En este sentido, el internacional checo recordó que "los bases" de su equipo, el serbio
Nenad Miljenovic y el canadiense
Jermaine Anderson, "no conocen la Liga pero que no jugasen al final del partido pasado no significa que no tengan nivel", ya que se trata de "dos jugadores muy válidos".