Costó reclutarle, porque el Montpellier se resistió lo que pudo, aunque, finalmente, lo liberó a cambio de siete millones de euros. Fue uno de los refuerzos estrella de la temporada 17/18, si bien no tuvo suerte ni acierto a las órdenes de Quique Setién. Tampoco demasiada continuidad, pese a lo cual acumuló más de 1.500 minutos y 29 apariciones en la campaña de su debut en LaLiga, con tres goles y otras tantas asistencias en su haber, unas cifras que bajaron un poco en la 18/19, manteniéndose gracias a su cesión al Celta en la segunda vuelta (1.341' y 23 partidos, con 1+2). Su retorno a la Ligue 1 estaba cantado y se produjo hace tres veranos, perdiéndole el Betis la mitad de lo que pagó en su día.
El arranque de Ryad Boudebouz con el Saint-Étienne fue prometedor (casi 2.000 minutos, repartidos en 30 encuentros, con dos goles y cuatro asistencias), pero su rol fue perdiendo fuerza, hasta el punto de encontrarse en la rampa de salida casi en cada ventana de transferencias. Rumores de salida que él mismo se encargaba de zanjar, argumentando que quería quedarse y triunfar con 'Les Verts'. La campaña pasada la cumplió sin pena ni gloria (15 compromisos, con 711 minutos diputados), pero el de Colmar parece estar viviendo una segunda juventud a las órdenes de Pascal Dupraz, sustituto las pasadas Navidades de Claude Puel. De hecho, ya ha actuado tanto o más que el ejercicio anterior.
Y es que, a punto de cumplir 32 años, Boudebouz lleva 16 partidos y más de mil minutos con el ASSE, club con el que acaba de batir un récord que habla bien a las claras de la trascendencia de su carrera deportiva. No en vano, el tanto que marcó este sábado ante el Lens (que no valió para sumar, puesto que perdieron 1-2), es el 50º del atacante ex del Betis, que se sitúa en el podio de internacionales argelinos más prolíficos de las cinco grandes Ligas europeas, solamente por detrás del artillero del Niza Andy Delort (69) y el extremo del Manchester City Ryad Mahrez (71). Ryad, eso sí, deberá buscar una nueva aventura, pues termina contrato el próximo 30 de junio, aunque, si mantiene el actual nivel, no le faltarán pretendientes. Hasta no habría que descartar una propuesta de renovación desde las oficinas del Stade Geoffroy-Guichard en las próximas fechas.