Uno de los futbolistas que ha cambiado el parecer de Quique Setién este verano es Darko Brasanac, quien se ha ganado un sitio en el primer plantel heliopolitano, tal y como confirmó ayer el técnico cántabro: “Ha demostrado unas prestaciones extraordinarias y lo que puede dar lo está haciendo extraordinariamente bien. Si le pedimos más cosas de las que puede dar nos frustrará. La idea es que se quede”.
Así las cosas, el jugador le ha ganado la partida a Víctor Camarasa, quien se ha visto obligado a salir cedido en busca de proyección. Brasanac, cuya posición natural es la de centrocampista, puede jugar también de carrilero, como hizo en la final del Trofeo Ramón de Carranza tras la lesión de Francis.
En cuanto a los descartes (Álex Alegría, Tosca y Narváez), reconoció el técnico que tienen opciones para marcharse, siendo varios los equipos de Segunda división los que se han interesado en contratar sus servicios.