Francisco Salas3 min lecturaEl Real Madrid sufrió una dura derrota ante el Efes en la décima jornada de la Euroliga, pero aún así este será un día para el recuerdo de la entidad blanca, ya que una de sus mayores leyendas ha entrado para siempre en la historia de la competición. Y es que Sergio Llull, se convirtió en el quinto jugador que alcanza los 4.000 puntos en total en la historia del torneo durante el encuentro disputado en el WiZink Center.Llull, que tiene el récord de triples en la competición y antes del inicio del choque necesitaba solo tres puntos para llegar a esa cifra, se quedó a las puertas con una canasta en el arranque del último cuarto; sobrepasando la barrera al anotar un lanzamiento exterior a falta de 5:17. De esta manera entra en el top-5 y sigue acercándose al cuarto, su compatriota Juan Carlos Navarro, quien acabó su carrera con 4.152 puntos, por lo que tiene en su mano conseguirlo incluso este año. Son dos de los mejores anotadores exteriores patrios de la historia y para siempre estarán en los libros de la máxima competición continental.
Algo por delante aparecen Vassilis Spanoulis, con 4.455, Nando de Colo, con 4.568 y Mike James, quien aún está en activo y es el primero con 4.751. Por su parte el checo Jan Vesely es sexto justo por detrás de Lull con 3.930. El jugador del Barça está muy cerca y es probable que no pase de este año cuando alcance la cifra.
Superado ese registro, Llull sigue haciendo historia en la máxima competición europea mientras se acerca a otra plusmarca aún más especial, la de ser el jugador con más partidos en la historia del torneo. Tras haber alcanzado los 417 ante los turcos; solo Kyle Hines, con 425, queda ya por delante de él. El de Mahón rechazó múltiples veces a la NBA y prefirió seguir en el Real Madrid, donde se ha erigido como uno de los más grandes de la gran historia blanca.
Tras las salidas de Rudy Fernández y Sergio Rodríguez, el 23 es el último referente de esa generación dorada que llenó de éxitos al equipo capitalino en la época de Pablo Laso primero y con Mateo después. Además, claro está de los infinitos éxitos conseguidos con la selección española. Y en ambos casos, tanto a nivel de club como de país, desde el trabajo día a día y luchando por sacar la cabeza hasta ser quien es hoy en día.