El Baskonia de Pablo Laso sigue con su temporada más que complicada y cada vez tiene más complicado repetir su hazaña del año pasado en la que se coló en el 'play-in' de la Euroliga. Más aún después de lo sucedido este viernes, cuando el Partizán de Belgrado ha pasado por encima de ellos en su feudo después en un segundo cuarto casi perfecto en el que culminó un parcial de 23-2, y que fue clave para que los serbios se llevaran por 86-73 el choque de la vigésima séptima jornada de la máxima competición europea.
Los azulgranas reaccionaron al final del tercer cuarto y fueron creciendo en el último asalto hasta que el acierto exterior de los locales echó por tierra todos los intentos de los vascos. Carlik Jones y Sterling Brown fueron una pesadilla para los de Pablo Laso que vivieron de los chispazos de algunos de sus jugadores, pero fue insuficiente ante la fuerza anotadora de los serbios.
El duelo comenzó con un intercambio de golpes e intensidad, pero fue el conjunto local el que encontró el aro con más facilidad con el motor de Jones y Brown. Los cambios mejoraron ofensivamente a los azulgranas pero un parcial veloz de los serbios les dejó por delante con un 25-18 tras los primeros diez minutos. El agujero creció para los locales por encima de los 20 puntos con un 23-2 que dejó noqueado a los vascos. La intensidad defensiva de los balcánicos bloqueó a las azulgranas que sudaron cada punto y solo lograron 7 tantos en un segundo acto que se cerró con un 45-25.
Los de Pablo Laso también sufrieron en los primeros compases de la segunda parte pero reaccionaron tras el ecuador del mismo al encadenar buenas defensas. Siete puntos consecutivos de Markus Howard metieron en el partido de los baskonistas que bajaron la renta hasta los nueve puntos, hasta que un triple de Iffe Lundberg dio aire a los locales, 63-51. Ahí los de Zeljko Obradovic tuvieron dudas y el Baskonia aprovechó el momento para echar el aliento a los serbios. Luka Samanic y Trent Forrest tiraron del carro vitoriano hasta que volvió a apareció Carlik Jones para abrir de nuevo un hueco fundamental para el Partizan, que mantuvo la calma cuando mejor estaba. Dos triples de Isaha Mike volvieron a poner tierra de por medio y dinamitaron el intento de reacción del Baskonia para llevarse el duelo por 86-73.