Pocos esperaban que ocurriese, pero así ha sido. El Baxi Manresa se ha convertido en el primer equipo que asalta esta temporada el Palau Blaugrana después de trece partidos entre todas las competiciones. En un derbi catalán muy igualado, los 15 puntos de Marcis Steinbergs fueron clave para que visitantes reforzaran su candidatura a la Copa del Rey logrando un prestigioso triunfo ante el Barça por 82-83. Concluido el encuentro, Roger Grimau aseguró que habían tocado fondo tras la que es su segunda derrota consecutiva en la Liga ACB.
"Es el peor momento desde que estoy aquí a nivel de resultado y sensaciones, pero esto es una rueda y va muy rápido. Nos gustaría estar mejor y no haber tenido un par de días malos que nos han costado la derrota. A seguir, no hay más", afirma antes de dejar claro que está muy afectado por lo que está viviendo en el banquillo azulgrana en las últimas fechas.
"No sé muy bien cómo analizarlo. No hemos hecho un buen partido. Nos han penalizado los malos momentos que hemos tenido y hemos llevado el partido a un cara o cruz que no hemos sabido ganar. Han sido mejores. Han estado más regulares durante todo el partido, luchando. En algunos momentos nos han superado a nivel físico, nos han apretado mucho y no hemos sabido igualar. Cuando lo hemos hecho, es cuando mejor hemos jugado, pero no hemos sido lo regulares que hacía falta para ganar", añade.
Cuestionado por si sus han tenido exceso de confianza en los últimos encuentros y si eso les ha llevado a perder, Grimau tiene claro que en ningún momento ha ocurrido algo por el estilo.
"No tiene nada que ver con la relajación ni creerse mejor que nadie. Hemos tenido varios momentos malos tanto hoy como el domingo y nos están penalizando. Cuando sacamos ventajas, no tenemos constancia. En las últimas semanas nos está faltando esto. No creo que sea un hecho puntual de la salida, durante el partido no hemos conseguido tener esta regularidad", analizó.
Encajado el golpe, Grimau aboga por hacer de éste un motivo más para trabajar duro y sacar adelante un proyecto en el que sigue confiando ciegamente pese a los últimos tropiezos.
"A salir de esto más fuertes, a ver si somos un equipo en el que estamos realmente unidos como parece y hemos estado hasta día de hoy. La única cosa buena de un mal momento es que cuando sales sales más fuerte. Estoy satisfecho con el compromiso y las ganas del equipo de ganar. Es un mal momento, pero saldremos más fuertes", concluye.