Comienza el gran momento del año para el tenis español, la tierra batida. Aún no están en marcha los grandes torneos, que arrancarán a partir de la semana que viene con el Masters 1000 de Montecarlo, y a partir de ahí será un no parar que vaya hasta Barcelona, pasando por Madrid, Roma y termine a lo gran en Roland Garros, ya entrados en junio. Pero antes de eso hay una semana más tranquila en la que se empieza con calma, con torneos menores que son una gran oportunidad para tenistas que tienen en esta superficie su campo de batalla predilecto y buscan tocar metal sin tantísima competencia.
Un claro ejemplo de ello es Roberto Carballés. El granadino siempre cumple en arcilla y es uno de los grandes exponentes de una clase de jugador en extinción, la del arcillero español duro y competente que se agarra a los partidos como nadie. Pues bien, con esa premisa se ha plantado en Marrakech esta semana, y por ahora ha comenzado muy bien. Y es que el español, quinto cabeza de serie, se clasificó este lunes para octavos de final del torneo de Marrakech tras derrotar al local Taha Baadi, número 597 del mundo, por 7-6 y 6-3.
Carballés, número 51 del ránking de la ATP, solventó su triunfo en dos horas y dos minutos ante un rival al que no se había enfrentado hasta ahora, para plantarse en segunda ronda de un torneo en el que busca recuperar su corona, lograda en 2023 y que no pudo levantar el año pasado. Pese a que el tinerfeño se vio comprometido en el primer set, a falta de precisión en el saque, lo que llevó a que se decidiera en el 'tie-break', supo salir adelante en la segunda manga para enlazar cuatro juegos consecutivos y hacerse con el triunfo. Ahora aguarda ahora a su rival en segunda ronda, que saldrá del choque entre el alemán Daniel Altmaier y el finlandés Otto Virtanen.
Más allá de Carballés en el cuadro hay jugadores de gran nivel como Tallon Griekspoor, Lorenzo Sonego o Nuno Borges, sin olvidar claro está a una de las grandes sensaciones del curso para el tenis español, Jaume Munar, quien vuelve a la tierra tras sorprender a propios y extraños con su gran desempeño sobre pista rápida este invierno. El balear es el sexto cabeza de serie y tendrá sobre él muchas expectativas.