El tenis español revienta en casa

El primer ATP Challenger de la temporada está dejando resultados e imágenes que no hacen sino dar esperanza de que el mal momento que ha vivido el tenis español en los dos últimos años, como Alcaraz casi como único referente, puede quedar en el pasado en no demasiado tiempo.

La semana, ya de por sí, está siendo ilusionante para la Armada Española. Pedro Martínez demostró seguir en un gran estado de forma y sólo se vio frenado en Rotterdam por Carlos Alcaraz. Y, en Dallas, Jaume Munar demostró que sus semifinales en Hong Kong y su gran actuación ante Casper Ruud en el Open de Australia no eran casualidad. Alcanzó unas nuevas semifinales, esta vez de un ATP 500, y se las verá de nuevo con el noruego en busca la primera final de su carrera.

Pero donde sí habrá un español en la final es en el Challenger de Tenerife. Allí, Pablo Carreño sigue mostrando su progresión tras el suplicio vivido en las últimas temporadas. El gijonés alcanzó las semifinales 'imitando' a Alcaraz y cediendo sólo tres juegos en su partido de cuartos de final. Carreño sólo ha perdido un set, ante el emergente Gaubas, y sigue su camino imparable hacia la final.

En semifinales le espera otro español, el catalán Pol Martín, quien ganaba el duelo español de la jornada de cuartos ante Barranco y ahora aspira a meterse en su primera final ATP y alcanzar el mejor ránking de su carrera.

Alejandro Moro quiere dar el gran salto

Aún hay un tercer español en semis y es el que mejor ránking tiene de todos. Alejandro Moro se cruzará con el portugués Henrique Rocha por un puesto en la final después de superar al libanés Benjamin Hassan. Moro también podría recuperar el mejor ránking de su carrera de ganar este ATP Challenger y quiere sumar puntos para llegar a la temporada de tierra lo más arriba posible, lo que le permitiría entrar directamente en algunos torneos.

No es sólo la presencia de tres tenistas españoles en esta ronda, sino la imagen que han ofrecido otros miembros de la Armada y que augura un mejor año para todos ellos. El andaluz Pablo Llamas, que ha tenido que estar medio año parado por una lesión, parece empezar a ver la luz y sólo el propio Moro pudo frenar su progresión. Y el navarro Iñaki Montes de la Torre, otro que este año se centrará en el circuito ATP tras acabar como número uno de la NCAA norteamericana, dio buena cuenta de uno de los grandes favoritos: el finlandés Emil Ruusuvuori. De hecho, el propio Iñaki Montes jugará hoy la final de dobles, un duelo en el que los cuatro integrantes serán representantes de la Armada.