“Tener a Rafa aquí es especial, lo importante para él es ir cogiendo ritmo de partidos y sobre todo que no se lesione”, decía David Ferrer, director del Conde de Godó, hace unos días sobre la presencia en el torneo barcelonés del que había sido tantas veces su compañero en la Copa Davis y su rival en la pista.
Tras más de cien días de espera y con sólo tres partidos disputados en casi año y medio, Rafa Nadal volvió a las pistas para ganar muy fácil (6-2 y 6-3) al italiano Flavio Cobolli en primera ronda. Luego, caería por 7-5 y 6-1 ante De Miñaur y daría muestras de que no está aún para plantar cara a los mejores tenistas del circuito.
El propio De Miñaur daba la clave en lo que le falta a Nadal, la frescura y velocidad que da la continuidad en el juego y los partidos. Y que tiene un mes para adquirir antes de Roland Garros. "La sensación de bola ante él no ha cambiado. Rafa tiene bastante fuerza al golpear, aún tiene mucho winner, lo hemos visto en varios puntos hoy. Lo que le está costando un poco más es moverse, pero es algo normal en alguien que viene con tanto tiempo sin jugar. Y en la tierra es algo que es más difícil de coger. Pero su peso de bola sigue siendo igual...”, añadía el australiano.
Esta semana, Nadal encara su segunda prueba. Desde el jueves se encuentra ya en Madrid preparando el Master 1.000 que arranca hoy con la fase previa en el que, salvo Djokovic, cuenta con la mayor parte de los mejores tenistas del mundo. Ahí, aunque no cuadre con un cabeza de serie de primeras, ya tendrá rivales complicados desde primera ronda. Aunque también lo afrontará con la convicción de haber pasado casi una semana más golpeando la bola y poniéndose a punto; y entrenando con tenistas de primer nivel.
Y con un ránking que, pese a que sigue siendo muy alto, ya empieza a subir. Los 25 puntos sumados en el Godó le han permitido a Nadal tener la mayor subida de la semana con un avance de 132 puestos, hasta el 512 que ahora ocupa y que dejará atrás con lo que añada en el Mutua Madrid Open.
Una clasificación de la ATP que cambia poco arriba, pese a los 500 puntos perdidos por Carlos Alcaraz, pero que ya tiene a Casper Ruud en sexta posición tras su triunfo en Barcelona. Alejandro Davidovich, 28 del mundo, sigue siendo el segundo mejor español. Y Pedro Martínez, tras subir 40 posiciones, se acerca al Top-50.
En el ránking WTA, por otro lado, ya hay una española menos entre las 100 primeras, después de que se confirme la salida de Paula Badosa, que pasa a ser la 101 del mundo tras perder 8 posiciones. La tenista española defiende esta semana en Madrid 120 puntos, por lo que podría caer aún más de no pasar rondas.
A día de hoy, pese a que se ha sorteado el cuadro final y se cruzaría en su debut con una tenista de la fase previa, aún no ha confirmado su presencia después de la lesión que sufrió el miércoles ante Aryna Sabalenka.