Sinner se confiesa delante de todos

El tenista italiano, tras el escándalo protagonizado por su doble positivo por clostebol, ha decidido despedir tanto a su fisioterapeuta como a su preparador físico

Sinner se confiesa delante de todos
Jannik Sinner ha optado por refrescar su organigrama técnico. - CORDON PRESS
Alberto GálvezAlberto Gálvez 5 min lectura

Jannik Sinner no quiere tropezar dos veces con la misma piedra y, por si acaso, ha decidido poner punto y final a su relación profesional con Umberto Ferrara (preparador físico) y Giacomo Naldi (fisioterapeuta). Tras el escándalo surgido y sufrido por parte del tenista italiano en los últimos días en relación a su positivo por clostebol, ha optado por despedir a ambos de su organigrama técnico.

Según ha adelantado Corriere dello Sport, el número uno del mundo ha tomado esta drástica decisión a las puertas del US Open porque les considera los principales responsables de su doble positivo en clostebol, como así se lo hizo saber a la ITIA y a un tribunal independiente de expertos.

Según el tenista, fue Umberto Ferrara el responsable de la compra del spray Trofodermin, que contenía clostebol, para que se lo aplicase el fisioterapeuta Giacomo Naldi sobre un corte en un dedo de la mano. El error aquel 5 de marzo en Indian Wells fue que Naldi no se lavó las manos ni usó guantes para tratar a Sinner, por lo que se produjo la contaminación involuntaria de clostebol.

Al menos, Sinner ha podido demostrarlo y se ha librado de una grave sanción, pero ha sido castigado teniendo que devolver el dinero y los puntos que logró en el Masters 1.000 californiano.

Lo que más extraña es que haya sido ahora cuando haya decidido prescindir del servicio de estos dos ayudantes, cuando Sinner sabía desde hace tiempo el doble positivo que había dado con dicha sustancia. Sin embargo, dicha fuente italiana mencionada anteriormente subraya que Jannik ya llevaba tiempo alejado de su preparador físico y de su fisioterapeuta, pero no ha sido hasta ahora cuando ha tomado la decisión de separar sus caminos de manera definitiva.

El portavoz de Sinner aclara su problema

El portavoz de prensa del tenista Jannik Sinner, Fabienne Benoit, ha asegurado que el italiano "sufre una enfermedad de la piel llamada dermatitis psoriasiforme por la que la piel de los pies y la espalda se daña", en respuesta a las críticas recibidas después de que se hiciese público el positivo por clostebol, durante el torneo de Indian Wells, que no acarreó una suspensión.

Dicha sustancia, presente en "menos de una milmillonésima parte de un gramo", según informó en su momento el equipo del italiano, llegó a parar al organismo de Sinner durante el tratamiento que recibió de su fisioterapeuta, que "compró un producto de venta libre en una farmacia italiana para curar un corte en su dedo".

En declaraciones al diario alemán Bild, el responsable comunicativo ha resaltado que dicha enfermedad "a las personas dañadas les suelen picar mucho, lo que provoca rascados y, en consecuencia, pequeñas grietas y heridas en las zonas correspondientes". La razón por la que se habría producido el corte por el que el equipo del tenista empleó el medicamento.

La confesión de Sinner antes del US Open

El italiano Jannik Sinner, número uno del mundo, ha defendido este viernes su inocencia tras la polémica por su positivo por dopaje que quedó sin sanción al ser considerado un error de uno de sus fisioterapeutas.

"Por supuesto no es ideal (lidiar con esto) justo antes de un 'grand slam', pero sé que no he hecho nada malo. Ya tuve que jugar durante meses con esto en mi cabeza, simplemente recordándome que no he hecho nada malo. Siempre respeto las reglas y siempre lo haré", dijo el tenista en la jornada de medios del Abierto de Estados Unidos, que comienza el próximo lunes en Nueva York.

"Estoy feliz de que finalmente se sepa porque es también un poco un alivio para mí y para mi equipo (...). Obviamente la preparación para este torneo no ha sido perfecta por ciertas circunstancias. Pero ya está ahí fuera. Es algo que estaba esperando: el resultado", argumentó el italiano.