Jannik Sinner es quien lleva acaparando todos los focos del mundo del tenis desde hace varias semanas, cuando se conoció su doble positivo en clostebol. Casi todos los expertos y compañeros se han pronunciado sobre el caso, recibiendo el italiano apoyo por parte de algunos y críticas feroces por parte de otros que en su día no pudieron defenderse de la misma manera.
Y, ahora, tras conquistar el US Open de 2024, el transalpino ha recibido el veredicto final de su caso. Y era algo que el número uno del mundo necesitaba más que un Grand Slam para poder callar las voces de aquellos que le han atacado durante todo este tiempo. O de lo contrario, cumplir con el castigo correspondiente.
Pero el tiempo para nuevas alegaciones ha terminado y el número uno del mundo ha quedado totalmente absuelto de las acusaciones de dopaje, ya que la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) no ha presentado ningún recurso ante el Tribunal Internacional de Arbitraje Deportivo (TAS).
Al menos, así se lo ha confirmado la secretaría del TAS al diario italiano Corriere della Sera, subrayando que en el plazo de apelación de 21 días, que ya ha finalizado, la AMA no ha recurrido la sentencia de la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) que le declaraba inocente.
Cabe recordar que Sinner dio positivo en un control antidopaje en el Masters 1.000 de Indian Wells, pero la ITIA le declaró inocente el 19 de agosto, una semana antes del Abierto de EE.UU que ganó el italiano, al considerar que se trató de un error del fisioterapeuta del jugador por usar un producto con clostebol.
La decisión del ITIA provocó un importante debate dentro del mundo del tenis sobre si Sinner recibió trato de favor por ser uno de los tenistas más importantes del circuito mundial organizado por la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) en estos momentos.
La absolución definitiva fue estudiada durante tres semanas por los abogados de la AMA, que analizaron una decena de recursos presentados ante el TAS sobre el clostebol, un esteroide presente en pomadas y aerosoles cicatrizantes.
De esta manera, Sinner, de 23 años, ya podrá dormir tranquilo tras haberse quitado de una vez por todas la etiqueta que muchos ya le estaban colgando sobre su espalda. Tras convertirse en el primer italiano en ganar el Abierto de EE.UU, Sinner lleva ya ganado 16 títulos individuales en su carrera.