Las certezas no están a la orden del día en esta edición de Roland Garros, y es que con el último baile de Rafa Nadal finiquitado por Zverev en primera ronda, todo quedaba en manos de la nueva guardia, o de volver a ver triunfar a Novak Djokovic. Pero es que esta nueva horda de talentosos hombres, comandada por Carlos Alcaraz y Jannik Sinner, llega a este segundo grande con problemas por culpa de las lesiones, el español en el antebrazo y el italiano en en la cadera. El número 2 del mundo se tuvo que retirar en Madrid y saltarse Roma, pero parece que fue la decisión correcta, porque ha llegado a París como un auténtico toro.
El italiano encadenó su décima victoria en Grand Slam, sumando su siete triunfos de su coronación en Australia, al derrotar al ruso Pavel Kotov, 56 del mundo, por 6-4, 6-4 y 6-4, camino de los octavos de final del torneo parisino por cuarta vez en su carrera. El transalpino de 22 años, vencedor a principios de año del primer Grand Slam del curso, no ha perdido un set en su ruta hacia la segunda semana de París, se ha mostrado en cada duelo dominador sin dejar ningún síntoma de sus problemas físicos.
Sinner, que si no levanta la Copa de Mosqueteros el serbio Novak Djokovic, le arrebatará el número 1 del mundo, convirtiéndose en el primer italiano en lograrlo, se medirá contra el ganador del duelo entre el francés Corentin Moutet y el austriaco Sebastian Ofner. Su rival de este viernes, que había eliminado en la ronda previa al suizo Stanislas Wawrinka, de 39 años, ganador de Roland Garros en 2015 y finalista dos años más tarde, no le causó más problemas que los dos anteriores, Gasquet y Eubanks, a los que también batió en tres sets.
Sinner, uno de los tenistas más en forma del momento, con victorias este año, además de en Australia, en Rotterdam y Miami, aumenta así sus opciones de vencer en el Bosque de Bolonia, donde se le está quedando un cuadro cada vez más cómodo, más aún tras la derrota de Rublev; eso sí, a falta de ver lo que pueda hacer Carlos Alcaraz contra Seb Korda y en duelos venideros, ya que ambos se cruzarían en unas hipotéticas semifinales. No obstante, por el otro lado del cuadro, Alexander Zverev y Novak Djokovic siguen con paso firme hacia la segunda semana.