Los grandes estandartes del tenis mundial son ahora mismo Jannik Sinner y Carlos Alcaraz. El italiano acaba de adelantar al murciano en el ranking ATP, pero ambos han conseguido algo que era habitual en el Big Three, dominar de forma consecutiva los dos primeros Master 1000, el de Indian Wells, en el que el murciano fue superior al de San Candido en una semifinal que ya se puede catalogar entre los mejores duelos del año, mientras que en Miami el duelo no pudo darse porque Alcaraz cedió en la semifinal ante un gran Grigor Dimitrov, que no tuvo ninguna opción frente a Jannik en la final.
Ahora ambos afrontan la temporada de tierra con muchos puntos que defender en el caso del español, y con el italiano con opciones incluso de acceder al número 1 del mundo, si Novak Djokovic no es capaz de hacer un buen Roland Garros donde defiende los 2000 puntos de su victoria de 2023. El sueño y la posibilidad que tienen es la de sumar su primer Roland Garros. Y son favoritos, porque aunque Sinner ha sufrido históricamente en tierra batida, llega en un momento insuperable; y para el de El Palmar la arcilla es su superficie favorita. Pero ambos tienen mucho bagaje en ella, de hecho, para ver el primer enfrentamiento como profesionales entre ambos hay que remontarse hasta 2019, cuando en la pista de tierra de Villena se vieron las caras, una contienda de la que ayer se cumplieron exactamente cinco años.
Carlos Alcaraz era a sus quince años una de las grandísimas promesas del tenis mundial y a sus 15 años buscaba su primer triunfo en un partido de categoría ATP Challenger, y enfrente tenía a Sinner, un escuálido italiano que le pegaba muy bien a la bola, pero al que aún le faltaban muchas cosas. No obstante, ambos regalaron uno de los mejores partidos del torneo, en el que pese a la edad se vieron muchos detalles de élite. El murciano empezó como un tiro, aprovechando que era un desconocido y plantó un 6 a 2 cómodo, pero Sinner respondió en el segundo con un 6-3 y en el tercero usó esa inercia para ponerse por delante con tres juegos de ventaja, pero fue un espejismo, porque apareció el Carlos que ahora asusta, para ganar seis parciales seguidos y cerrar su primer triunfo. Pese a que parezca que no era nadie, Sinner acabó ese año venciendo en las ATP Next Gen Finals, la prueba más importante para los jóvenes del circuito, y donde 'Carlitos' reinó en 2021.
Ahora podrían volver a enfrentarse, pero en lugar de en Villena en una pista anexa, sería en la Philippe Chatrier, la gran catedral del tenis, en donde en unas semanas deberían estar luchando por la Copa de los Mosqueteros, siempre y cuando Novak Djokovic y ojalá que Rafa Nadal, no tengan nada que decir al respecto.