No ha podido más Sara Sorribes. La tenista castellonense está teniendo una gira de tierra batida excelsa en la que ha conseguido grandísimas gestas, sobre todo en el Mutua Madrid Open, donde accedió a octavos de final del cuadro individual ganando a varias cabezas de serie por el camino, hasta que se topó con la a la postre campeona, Iga Swiatek, mientras que en dobles se hizo con el torneo junto a Cristina Bucsa. En Roma estaba en tercera ronda, donde llegó tras vencer a la rusa Pavlyuchenkova en una batalla sin cuartel, pero no ha podido igualar el resultado madrileño porque se ha encontrado con la cabeza de serie número 9, toda una campeona de Roland Garros como Jelena Ostapenko.
La española presentó batalla ante la letona, pero cayó eliminada en tres durísimos sets por 6-4, 5-7 y 6-1, en los que acusó las muchas horas en pista de las últimas semanas e hincó la rodilla ante la perseverancia y el acierto de la número 10 del ranking. Dejó escapar una oportunidad muy buena de llegar más lejos aún, porque la ganadora se medirá en octavos de final a la eslovaca Rebecca Sramkova,. número 120 de la WTA.
Más de 2 horas y media le costó a Ostapenko eliminar a Sorribes. La que el año pasado fue la verdugo de Paula Badosa en los cuartos de final de este mismo torneo, también en 3 sets, tuvo que sacar su mejor versión ante la de Castellón de la Plana, que exhibió poderío en todo el partido pese a la derrota. Porque pese a perder el primer set cuando fue ella la que rompió primero, no cesó en su empeño en el segundo, en el que llegó a ir 3-0 abajo. Tras ese golpe remontó para ponerse 4-3. Estaba segura, haciendo buen tenis, ágil y certera desde el fondo de la pista.
Tanto que como es habitual, Ostapenko se frustró y perdió el parcial, obligando a su rival a estar más tiempo en pista si quería vencerle. Sin embargo, en el tercero a Sorribes le pesaron mucho más las piernas y no pudo hacer nada ante la de Riga, dueña absoluta de la pista, que cerró la manga en 42 minutos, la más rápida del partido, para confirmar su billete a octavos. Ahora Ostapenko se queda como una de las grandes favoritas, mientras la número uno patria tendrá unas semanas para preparar Roland Garros.