Novak Djokovic no ha podido revalidar su título de Roland Garros. Y el serbio tenía tantas ganas de hacerlo que, días después de tener que retirarse del torneo por culpa de una lesión, aún trata de asimilar lo ocurrido.
Porque la estampa que ha dejado 'Nole' este año en París ha sido inusual en él. Llegó a la competición con muchas dudas sobre su físico, pero a medida que avanzaban las rondas se le veía más cómodo. Hasta que se produjo el momento más inesperado por todos. Un resbalón le provocó un desgarro en el menisco de una rodilla que ya venía tocada desde antes.
Pese a ello, aguantó como pudo y venció a Casper Ruud en el quinto set. Pero conforme pasó la noche, los dolores aumentaron y las pruebas confirmaron que lo mejor era que abandonase y pasara por el quirófano.
Y el tenista balcánico ya ha hablado tras ser operado en París: "Ayer tuve que tomar decisiones difíciles después de desgarrarme el menisco durante mi último partido. Sigo procesándolo todo, pero estoy feliz de contaros que la cirugía ha ido bien. Agradezco al equipo de doctores que han estado de mi lado, así como el tremendo apoyo que he recibido de mis fans. Haré lo posible por volver sano y en forma a las pistas lo antes posible. Mi amor por este deporte es fuerte y el deseo de competir al más alto nivel es lo que me hace seguir".Según los plazos establecidos, estaría entorno a tres semanas de baja, lo que deja en el aire su presencia en Wimbledon, tercer Grand Slam de la temporada, donde defiende final y que arranca el 1 e julio en Londres.
No obstante, parece poco probable que vaya a participar en tierras británicas, sobre todo, porque el verdadero deseo de Djokovic este año es poder estar en los Juegos Olímpicos, que comenzarán el 27 de julio. Y es que, después de haberlo logrado todo en tenis, al serbio sólo le queda conquistar el oro olímpico.
De hecho, ha sido precisamente dicho reto el que parece haberle convencido al tenista para someterse a esta cirugía. Porque, además, él no suele ser partidario de pasar por el quirófano. En 2018 acabó por operarse en un codo tras años de dudas.
Tal y como se observa en la imagen que ha compartido a través de sus redes sociales, Novak ha abandonado la clínica por su propio pie y apoyado en unas muletas. Y lo mejor, rodeado de su equipo de trabajo en estos duros momentos para él.