La principal atención del mundo del tenis esta temporada de tierra es el retorno de Rafa Nadal. Más allá de la lucha de los tres mejores del mundo, Djokovic, Sinner y Alcaraz, que aparte de jugarse el ranking, son los favoritos indiscutibles para los torneos de Montecarlo, Barcelona, Madrid, Roma y París, la gran cita traca final de este tramo del año, con la disputa del segundo Gran Slam, Roland Garros. Pero volviendo a Nadal, el manacorí ya se perdió estos torneo en 2023, y justo antes de la cita parisina anunció que lo dejaba todo a un lado para prepararse y estar al 100% recuperado para vivir un último año este 2024.
Sin embargo nada ha ido como esperaba, primero porque una lesión muscular en la cadera cuando disputaba el torneo de Brisbane le alejó del Open de Australia, para más tarde renunciar a Indian Wells y Miami, de cara a prepararse para la arcilla. Ahí llegó el golpe, cuando causó baja en Montecarlo, pero no por la cadera, si no que tal y como anunció en la final de la Copa del Rey, sufrió hace dos meses una lesión en el abdominal que le estaba impidiendo entrenar con normalidad, y que por ello su cuerpo no le dejaba volver de momento al tenis.
El calendario de Rafa pasaba por todos los torneos terrícolas, y aunque Barcelona -el próximo lunes- está en el horizonte, y Madrid sería su oportunidad de despedirse en casa, ha dado un paso para al menos estar en el Master 1000 de Roma, la cita previa a su gran objetivo, Roland Garros. El torneo transalpino ha presentado su 'entry list' en la que están todos lo jugadores apuntados y ahí aparece el balear. Al llevar más de un año sin jugar no tiene ranking, pero tiene protegido el noveno, así que entrará al cuadro principal directamente; pero no será cabeza de serie y podría enfrentarse a cualquiera en primera ronda.
Pero esto es solo un indicativo de que tiene la opción de ir, pero no confirma nada, porque puede caerse en cualquier momento por lesión; no obstante, si eso sucede sería indicativo de que es muy probable que hayamos visto los últimos partidos en el circuito del campeón de 22 grandes, porque es casi imposible que llegue a Roland Garros sin haber disputado ni un solo minuto antes. En todo caso, habrá que esperar, y siempre quedará la bala de que llegue a los Juegos Olímpicos de París 2024 este verano.