Que Aryna Sabalenka ha terminado siendo la número uno del ranking WTA por méritos propios no lo discute nadie. Sus dos Grand Slams conseguidos y dos WTA 1000 ganados le han hecho brillar con luz propia en este 2024 que empieza a tener los días contados.
Sin embargo, tampoco se puede negar que el escándalo de Iga Swiatek así como los meses que se ha mantenido la polaca fuera de las pistas hayan contribuido a ello, ya que la diferencia entre ambas es tan sólo de 1121 puntos.
Para 2025, la bielorrusa se muestra optimista, pero sabe las dificultades que tendrá para retener su primera corona. Desde Arabia Saudí ha concedido una entrevista a The National y en ella ha repasado todo su año y ha subrayado cuáles serán sus primeros retos del año: "No puedo confiar en que voy a tener posibilidades de mantener el número uno del mundo al revalidar el Abierto de Australia a principios de año, se trata de una cuestión mental. Por supuesto que estoy con ganas de quedarme allí el mayor tiempo posible y trabajo duro para ello, pero veremos la próxima temporada. Para mí, significaría mucho revalidar el título".
Y analizando las claves que le han llevado a la cima en este año, Sabalenka lo tiene bastante claro: "Concentrarse en uno mismo y en intentar dar lo mejor de ti, ya sea en Australia o en cualquier otro torneo, siempre dar el máximo. Todavía tengo muchas cosas que lograr en el tenis".
Pero como en todo deporte, no todo es de color de rosa y hay momento de bajón. Unas circunstancias que Aryna ha vivido poco, pero ante las cuales tiene un método infalible: "Rara vez me falta motivación. Cuando noto que necesito un impulso simplemente recuerdo donde comencé y cuánto quería estar donde estoy ahora, lo que me vuelve loca y me ayuda a mantenerme hambrienta y motivada todo el tiempo".
Y, por último, ha tenido que responder a la pregunta del año en el circuito femenino, el dopaje de Swiatek. Un tema en el que no ha querido profundizar pero cuyo silencio y cuya respuesta dejan entrever cuál es su postura y su pensamiento respecto a la inocencia de la polaca: "La gente está acostumbrada a reaccionar exageradamente antes de darse cuenta de las cosas, así que no quiero hacer ningún comentario. Creo en el deporte limpio, no puedo decir nada más".