No es ni mucho menos el mejor momento de la carrera de Paula Badosa, y es que la tenista española, otrora la gran referencia nacional en la WTA, lleva más de un año muy lastrada por las lesiones, tanto que incluso se ha insinuado sobre una posible retirada, ya que tiene que jugar a veces infiltrada por su lesión crónica en la espalda. No obstante, su amor al tenis es superior y quiere seguir luchando por volver a un lugar donde por nivel debería estar de sobra, pero por esta problemática no está pudiendo, el top 100.
Apenas le quedan dos torneos con ranking protegido, por lo que debe elegir muy bien que balas gastar, y por eso ha renunciado a los Juegos Olímpicos, aunque no pierde la oportunidad de disputar cada evento que se le permite. Este es el caso de la prueba de Bad Homburg, en Alemania. Allí Badosa ha ofrecido buenas impresiones en su estreno en la temporada de hierba, con una victoria rápida, en una hora y diez minutos, sobre la neerlandesa Arantxa Rus por 6-4 y 6-1.
De vuelta a la competición individual tras Roland Garros, donde perdió en dieciseisavos de final contra su gran su amiga y rival acérrima Aryna Sabalenka, la jugadora española aprovechó una invitación del torneo germano para preparar su participación en Wimbledon, donde jugará con ránking protegido debido a sus recientes lesiones. Aquí gastará su penúltima opción. Eso sí, a su favor tiene que por la gran cantidad de puntos que se reparten, y al no haber jugado en 2023, en caso de hacerlo bien, puede dar un gran salto en la clasificación.
Ante Rus, 58 del mundo, Badosa, que actualmente es la 115, hizo bueno en el primer set la rotura que firmó en el juego inicial. Mientras que en el segundo parcial fue aún más sencillo. Con 5-1 tuvo sus dos primeras bolas de 'break' en contra, pero salvó ambas y aceleró hacia la victoria. Ahora el nivel sube, pues su próxima rival saldrá del choque entre la primera cabeza de serie, la griega Maria Sakkari, y la italiana Elisabetta Cocciaretto. Ahora podrá descansar, pues sus rival la conocerá el lunes. En el cuadro también hay protagonismo español en la figura de Sara Sorribes, la número 1 nacional, que sufre mucho en césped, y lo va a tener muy complicado en primera ronda ante la segunda favorita, la rusa Liudmila Samsonova, 15ª de la WTA.