La temporada en hierba no ha hecho más que empezar y ya ha generado lesiones, miedos, sorpresas y nuevas ilusiones, como las de Paula Badosa.
Y es que la tenista española nacida en New York se encuentra cada día más motivada y dispuesta a subir peldaños en el ránking WTA. Y como la cita en Wimbledon se antoja crucial para conseguirlo, Paula ha decidido aceptar la última invitación que ha recibido y que no entraba en su inicial hoja de ruta
Concretamente, la del torneo WTA de Bad Homburg, que arrancará la próxima semana y que cuenta con un extraordinario cartel. Maria Sakkari es la principal favorita al título, seguida de Liudmila Samsonova, Emma Navarro, Victoria Azarenka, Mirra Andreeva o Elina Svitolina. Sara Sorribes cierra la participación española en tierras alemanas.
Cabe recordar que Paula Badosa no juega en hierba desde que lo hiciese en un partido de dobles con Azarenka, precisamente en Alemania. Ahora y gracias a una wilcard, la española jugará este torneo con el fin de poder ir recuperando esas viejas sensaciones sobre una superficie que deleitará a todos a partir del próximo 1 de julio en tierras británicas. Al igual que ella, otras como Caroline Wozniacki o Bianca Andreescu también han sido invitadas y han aceptado igualmente la propuesta.
Con el deseo de ir borrando cada paso en falso que ha dado en los últimos años, Paula Badosa está luchando con su lesión de espalda como puede en el día a día. No quiere más abandonos ni más recaídas. Sabe que tendrá que lidiar con el dolor y deberá dosificarse para llegar a las grandes citas, en las que sueña con mostrar el nivel perdido.
Tras haber salido contenta de Roland Garros, donde cayó contra su amiga Aryna Sabalenka en tercera ronda, ahora la catalana quiere soñar a la grande en Wimbledon para poder olvidar cuanto antes su papel del año pasado, donde firmó el abandono número 28 de su carrera en cuadros individuales.
Y hablando de lesiones y retiradas, quien no atraviesa su mejor momento por estos motivos es Elena Rybakina. La actual número cuatro del mundo no termina de arrancar este año. Pese a que conquistó el WTA de Brisbane en enero, el de Abu Dabi en febrero y Stuttgart en abril, ya suma cuatro abandonos en 2024. El último, en cuartos de final del WTA de Berlín ante Victoria Azarenka. Con 3-1 para la bielorrusa y después de una doble falta, se marchó llorando al banquillo y tocándose el abdomen. Todo hace indicar que estará en Wimbledon, pero será difícil que repita lo de 2022, donde ganó sin haber hecho rodaje alguno en hierba.