Otro desastre para el tenis español en Australia

La temporada de tenis 2025 arranca esta semana, apenas unos días antes del cambio de año, y pese a que muchas de las grandes estrellas no van a tomar parte hasta el Open de Australia, que no llegará hasta la segunda semana, hay torneos en marcha con nombres importantes. Por ejemplo no podemos pasar por alto la United Cup, una competición mixta por selecciones en la que España está enfrascada, pero por ahora con resultados muy poco alentadores, ya que tras caer en el debut ante Kazajistán, la segunda jornada frente a la Grecia de Stefanos Tsitsipas no ha sido ni mucho menos mejor.

Contra los griegos, al igual que pasó contra el bloque kazajo, los españoles cedieron en el super desempate del dobles mixto, la segunda derrota de lo que va de torneo, y con la que se quedan sin opciones de superar la fase de grupos, ya que al solo ser grupos de tres naciones, el bloque patrio está eliminado, de hecho, el que pase de grupo se va a decidir en el duelo fratricida entre kazajos y helenos, con la clasificación en juego.

Motivos para soñar y un golpe de realidad

Pese a la derrota, España pudo soñar, ya que Jessica Bouzas, la gran promesa en lo que al tenis femenino se refiere, puso en ventaja al conjunto español en el encuentro individual femenino, al dar una de las grandes sorpresas del evento, consiguiendo una victoria que puede valer para poner en valor lo que puede ser la gallega, ya que superó a la ex top ten Maria Sakkari por un contundente 6-2 y 6-1 en un partido magnífico; sin embargo, el as griego, Stefanos Tsitsipas, pudo con el número 1 español, Pablo Carreño, al que venció por 6-4, 4-6 y 6-3.

De esta manera, de cara al dobles mixto, en el que España necesitaba el triunfo para mantener opciones, Grecia presentó a su mejor dúo, Sakkari-Tsitsipas, que no acusaron haber jugado apenas unos minutos antes, frente a Yvonne Cavalle-Reimers y Sergio Martos. Y los españoles sorprendieron en la primera manga con una rotura en el séptimo juego que les permitió hacerse con el parcial por 4-6, sin embargo, Sakkari y Tsitsipas reaccionaron, rompieron el saque de los hispanos en el cuarto y equilibraron el choque con un 6-3 para mandarlo al 'super tiebrerak', donde los griegos fueron más fuertes y tras varias idas y venidas se acabaron adjudicando el triunfo por 10-6.