España afronta el reto de seguir viva en la Copa Davis a domicilio, algo que no sucedía desde que cambió el formato, y sin su principal estrella: Carlos Alcaraz. Lo hará con un equipo que encabezan Pedro Martínez y Roberto Carballés y que, incluso, tuvo una baja inesperada tras el Open de Australia tras la salida por lesión de Alejandro Davidovich, uno de los destacados en el primer Grand Slam de la temporada.
Pedro Martínez será, precisamente, el encargado de abrir este sábado a partir de las 13:00 horas la eliminatoria entre Suiza y España ante Dominic Stricker, número 2 suizo; mientras que Roberto Carballés jugará el segundo punto contra Jerome Kym. A ellos, según la previsión inicial, se unirá en pista Jaume Munar, que jugaría el doble junto a Martínez el domingo.
No obstante, el que más ilusionado aparece no está en el cartel. Martín Landaluce entró en el equipo en sustitución de Davidovich y, en principio, no se le ha seleccionado para ningún encuentro. Aunque dependiendo de como vaya la eliminatoria y con un Pedro Martínez con tres partidos en pocas horas, no es descartable que podamos ver a la gran promesa del tenis español, por primera vez, luchando con la elástica de la 'selección nacional'.
"No contaba con venir. Estaba planeando hacer entrenos en Madrid y saber que iba a venir a la Copa Davis con todos ellos fue una sensación muy bonita", señala el madrileño desde Suiza en declaraciones distribuidas por la Federación Española. El joven tenista madrileño, de 19 años, ha sido una de las sensaciones de la temporada y, junto a sus compañeros de generación Joao Fonseca y Learner Tien, se ha dejado ver en tierras australianas, donde jugó la fase final del Open de Australia, su primer grande.
"Estoy con un gran nivel. Cada semana estoy jugando mejor, estoy sumando, estoy creciendo... Está siendo un camino muy chulo. Creo que estoy haciendo las cosas bien, entrenando bien y pueden venir unos días muy buenos", admite un Landaluce que tenía pensado regresar al circuito la próxima semana, en la previa de Marsella y que ahora llegará tras haberse fogueado en la Copa Davis. "Mi objetivo es seguir escalando en el ranking, jugar cada vez más partidos contra los buenos e intentar meterme en los mejores torneos. Creo que de cara a Roland Garros puedo hacerlo bien estos meses para intentar entrar en el cuadro final. A final de año me gustaría haberme visto con buenos partidos", asegura el madrileño sobre sus objetivos para la temporada que ahora arranca.
Martín Landaluce fue uno de los tenistas con mayor progresión en 2024, ganó en Olbia su primer ATP Challenger y se quedó a un puesto de las Next Gen. En este 2024 sólo ha jugado dos torneos, pero fue semifinalista en Camberra y se metió en el cuadro final del Open de Australia, lo que le ha permitido situarse como 135 del mundo, su mejor clasificación. El tenista madrileño, pese a todo, está con los pies en el suelo y no parece haberle afectado la presión. "Creo que lo he llevado bastante bien. Igual en esos primeros meses te sorprende un poco, pero en mi familia me han inculcado unos valores muy buenos y yo siempre he seguido mi camino. He hecho las cosas para mí, para ellos, y se está dando muy bien. Por ahora estoy muy contento con todo lo que estoy haciendo", reconoce.