Hacía muchos años que Novak Djokovic no llegaba a Roland Garros sin haber ganado un solo título en toda la temporada, pero este 2024 se va a acabar la racha, ya que el serbio entre lesiones, malas rachas y problemas varios, ha estado muy lejos de hacerse con ningún trofeo. Y eso que estas semanas tenía una oportunidad inmejorable en el Master 1000 de Roma, donde por lesiones Carlos y Jannik Sinner causaron baja y prefirieron descansar para Roland Garros, abriéndole el cuadro y dejándole como el claro favorito, pero solo con eso no se gana, y en el Foro Itálico ha estado sumamente lejos de su nivel.
Solo dos partidos pudo disputar en el torneo romano, donde tras pasar en segunda ronda contra Corentit Moutet, ante el que se repuso de un inicio irregular, vio como sus esperanzas se truncaban en tercera ante Alejandro Tabilo. Pero antes de repasar el duelo ante el chileno hay que irse hasta el final de su debut, y es que cuando estaba firmando autógrafos, a un aficionado se le escapó una botella de metal de la mochila y acabó justo en la cabeza de 'Nole', que tuvo que acudir a la enfermería.
Parecía un simple golpe que le iba a provocar una brecha y poco más, de hecho dos días después volvió a la pista, pero parecía prácticamente una sombra de sí mismo. Dos sets y 67 minutos le bastaron a Tabilo, cabeza de serie número 29 para certificar su pase a octavos, y acabar con el tiempo de un Djokovic al que le quedaban por delante varias semanas antes de empezar la defensa de su título en Roland Garros. Pero en la rueda de prensa no se cortó y dijo que lo había pasado muy mal tras el golpe e iba a tener que revisar si había algo más.
Pues bien, nada más volver a Serbia fue lo primero que hizo, ir al hospital y hacerse varios escáners para cerciorase de que todo estaba perfecto, y ya tiene diagnóstico. Según el medio serbio Republika, el número 1 del mundo está perfectamente y más allá del golpe y la brecha no tiene nada. Eso significa que no va a tener condicionantes externos en su sueño de conquistar su 25º grande en París, lo que significaría revalidar la 'Copa de los Mosqueteros' y mantener el número 1 del mundo. Además de que con la probable ausencia de Sinner y un Alcaraz renqueante, si está bien va a tener muchas opciones.