El tenista suizo Roger Federer se despidió en la noche de este viernes de su carrera profesional con una derrota ante los estadounidenses Jack Sock y Frances Tiafoe (4-6, 7-6 (2) y 11-9) en un partido de dobles junto al mejor amigo que le ha dado estas más de dos décadas en el circuito, el español Rafael Nadal, y en el torneo que él mismo creó, la Laver Cup.
Federer puso punto y final a 24 años de carrera en Londres, dejando atrás 20 títulos de Grand Slam, 103 torneos ganados, 310 semanas como número y uno de los estilos de juegos más elegantes y vistosos de la historia. El partido tuvo momentos de gran brillantez pero lo mejor, sin duda, llegó después del mismo.
El suizo no pudo aguantar la emoción del momento y rompió en lágrimas. A su lado, cargado de empatía, lloraba con él su gran amigo Rafa Nadal de manera desconsolada. Ambos intercambieron elogios en la sala de prensa y demostraron que su amistad va muchísimo más allá de las pistas de tenis. El último baile no pudo ser más emotivo.
"Hemos estado muy conectados, especialmente en los últimos diez años. Creo que desde que tengo hijos. No sé si eso me ha ayudado o me ha cambiado de algún modo o si nuestra rivalidad ha evolucionado. No tengo ni idea", comentó Federer en la rueda de prensa posterior al partido de dobles en la Laver Cup, tras el emocionado punto y final a su carrera en el tenis.
"Me hace muy feliz dónde está nuestra relación hoy en día, que pueda llamar a Rafa y hablar de lo que sea. Creo que él se siente del mismo modo. Ha sido especial también que la familia de Rafa haya estado estos días aquí, porque te demuestra que no es solo que Rafa haya venido a jugar y a nadie de su equipo le importe. Puedo sentir su pasión por mí, como persona", añadió Federer sobre su gran amistad con Nadal.
"Eso es muy importante. Creo que él se siente del mismo modo cuando ve a mis padres, a mis hijos, a mi esposa. Es algo muy bonito. Espero que a él le pase lo mismo con los hijos que va a tener. Le puedo dar algunos consejos. No es fácil -se rio Federer-, pero como padres siempre tenemos que dar lo mejor. Disfrutamos de la compañía del otro y tenemos muchos recuerdos, pero también nos gusta pasar tiempo juntos. Siento como que, cada vez que pasamos una tarde juntos, nos falta tiempo", reflexionó Federer.
Rafa Nadal no pudo contener la emoción en el homenaje a Federer tras el partido y rompió a llorar en el banquillo junto a su amigo. "Soy una persona bastante sensible. No me preocupa tampoco. Llorar es bueno a veces. Necesitas soltar estas emociones. Se va una parte de mi vida por lo que es difícil", explicó el balear.
"Ha sido emocionante, inolvidable, triste también. Es difícil -describirlo-, ha habido muchas emociones, pero bueno, al final, ha sido un día muy especial, inolvidable y al final para todos hay un comienzo y hay un final. Es la vida", dijo Nadal a los medios españoles, al tiempo que admitió que "fue muy difícil jugar" porque estaba "temblando de los nervios". "Son muchos años compartiendo muchos momentos. Cuando Roger se va del circuito, una parte importante de mi vida se va también".
"Estoy muy feliz de que Roger, después de muchos momentos complicados que sé que ha pasado en estos últimos tiempos, haya podido despedirse en la pista. Cosa que, personalmente, sabía que era difícil que pasara por cómo se encontraba. Estoy feliz de que se haya despedido, feliz de que haya recibido el momento que se merecía en la pista, enfrente de tanta gente y que el mundo haya podido verle despedirse en pista para mí es algo que realmente se merecía sin ninguna duda. Se va alguien que ha sido y es un icono, de los iconos más importantes de la historia del deporte en general", añadió Nadal, aún visiblemente afectado por la emoción.
"Para mí era importante porque sabía lo importante que era para él. Tengo una relación personal bastante estrecha desde hace mucho tiempo. El hecho de estar en el Consejo de Jugadores también hace que tengamos que hablar semanalmente de cosas y al final yo no me he retirado aún, pero sé que, cuando uno lleva tiempo con lesiones, que no ve el final, es frustrante y en ese sentido para él han sido tiempos difíciles, con recuperaciones que llevan mucho tiempo, mucho esfuerzo mental y al final te das cuenta de que no llegas. Que se haya retirado en la pista era muy importante para él y yo no podía faltar en este día. Y aquí he estado, más allá de las circunstancias personales en las que yo estaba".