Francisco Salas4 min lecturaPocos deportistas, no solo tenistas, han tenido una temporada mejor este 2024 que Jannik Sinner, que se ha erigido como el tirano de la ATP, algo que podía estar en duda por los títulos de Carlos Alcaraz en Wimbledon y Roland Garros; sin embargo, el final de campaña del de San Cándido ha hecho que todas las dudas que pudiera haber se disiparan. Y es que al US Open, su segundo grande del año, le ha sumado todos los torneos que ha jugado, salvo el ATP de 500 de Pekín donde le batió el murciano. Pero este domingo ha conseguido un nuevo hito al lograr las ATP Finals y convertirse, por primera vez en su carrera en Maestro. Además, de ampliar aún más su ya de por sí increíble dominio del ranking.
Sinner no falló en Turín y ante su público y sin ceder un solo set en el torneo, se coronó campeón invicto tumbando a Taylor Fritz por un doble 6-4, exactamente el mismo resultado que se dio en la fase de grupos. Fritz fue segundo en la fase previa, pero en semifinales pudo dar la sorpresa al batir a un Alexander Zverev que era el único que sobre el papel podía intimidar al número 1, pero el 'yankee' tenía otros planes. Además, el fuerte catarro de Alcaraz también le limó un grandísimo rival. Aunque eso sí, Fritz ha plantado cara, pero no ha sido capaz de igualar el ritmo del campeón en los momentos clave, algo similar a lo que pasó entre ellos en la final del US Open.
Esta vez no es ni mucho menos que Fritz no jugara bien, porque compitió como en sus mejores días, pero el problema es que Sinner estuvo otra vez intratable. Apenas cometió errores, durísimo en defensa y clínico en ataque. Y, si no comete fallos, las oportunidades para ganar son mínimas. Sinner es un jugador que desgasta al rival por ser un muro y por su tremenda facilidad para devolver cada bola más complicada de lo que le viene, más aún ante jugadores como Fritz, que juegan muy plano, lo que le permite jugar a aún más velocidad.
En el el primer set todo cambió con 3-3 en el marcador, cuando Sinner tuvo dos bolas de 'break' con 40-15 a su favor. Pero Fritz las salvó. Puso el 40-40. Pero no terminó de cerrar con su saque y Sinner se ganó otra bola de rotura. Otra vez salvó Fritz. A la cuarta, no hubo perdón del italiano, que encarriló el set, que acabó cerrando poco después.
Con Fritz obligado a reaccionar, nervioso por ver que se le escapaba otra oportunidad, Sinner aceleró. El estadounidense intentó refugiarse en su banquillo, desesperado en busca de una explicación, pero acabó sucumbiendo al infernal ritmo que ponía su oponente. Dos bolas de 'break' y puso el 3-2 a su favor. El 4-2 con su saque. La victoria estaba a un paso y la consiguió, pera certificar su triunfo número 70 del año y estrenarse como maestro. Y ahora le queda la Copa Davis, donde defiende título con Italia la semana que viene en Málaga.