La gran proeza que pasará a la historia de Roland Garros y de Perú

Juan Pablo Varillas consiguió clasificarse este viernes para los octavos de final del Grand Slam francés, algo que no había hecho nunca en ningún grande

La gran proeza que pasará a la historia de Roland Garros y de Perú
Juan Pablo Varillas - Instagram / juanpavarillas_oficial
José Antonio RiveroJosé Antonio Rivero 3 min lectura

La presente edición de Roland Garros está dejando multitud de sorpresas. Este viernes, el tenista peruano Juan Pablo Varillas logró una clasificación histórica para los octavos de final al vencer al polaco Hubert Hurkacz, quien era el cabeza de serie número 13, con un marcador de 3-6, 6-3, 7-6 (3) y 6-2. Ahora, se enfrentará al serbio Novak Djokovic, actual número 3 del mundo.

Varillas se convierte así en el primer jugador peruano en llegar a los dieciséis mejores en el Grand Slam francés desde Jaime Yzaga en 1994, y logra su mejor desempeño en un torneo de Grand Slam, ya que hasta esta edición de Roland Garros no había ganado ningún partido.

Después de haber remontado una desventaja de dos sets en sus primeros encuentros, Varillas demostró una gran determinación frente a un rival de mayor envergadura que buscaba llegar a los octavos consecutivos en París. Sus tres victorias en cinco sets muestran su capacidad de sacrificio y dedicación.

En un ambiente fervoroso, animado por una ruidosa afición peruana que aclamaba a su nuevo héroe nacional, Varillas logró la victoria más importante de su carrera.

Actualmente ubicado en el puesto 94 del ranking, Varillas obtuvo su tercera victoria contra un tenista del top-20 en toda su carrera, lo que demuestra que está viviendo un momento excepcional desde que llegó a París.

Hasta ahora, solo Yzaga había llegado a los octavos de final en un torneo de Grand Slam. Esto ocurrió en cuatro ocasiones: en 1985 en Estados Unidos, en 1991 en Australia, en 1994 en París y nuevamente en Estados Unidos. En Australia en 1991, superando esa ronda y también en Estados Unidos tres años después.

De cara a su partido del domingo frente a Djokovic, Varilla afirmó que le "llena de ilusión", dejando claro que no renuncia a nada al decir que no renuncia a nada, puesto que "cuando entras a la cancha estás al 50 por ciento".

"Espero poder ser un ejemplo para los niños, de que podemos hacer este tipo de cosas, que podemos jugar en este tipo de eventos, de que si trabajas y eres disciplinado, con consistencia y creyendo en ti mismo, es posible", afirmó tras la victoria ante Hurkacz.

Lo primero que hizo el jugador, de 27 años, fue ir a abrazar a sus padres, que le vieron jugar desde la pista, y que le han apoyado en el inicio de su carrera, sin exigencias, en unos años en los que "se gana cero" dinero. "Ellos se merecen toda mi gratitud", afirmó.