La gran favorita resucita en París

Iga Swiatek llevaba quince victorias consecutivas en Roland Garros antes de saltar a la pista para disputar la segunda ronda contra Naomi Osaka, y ha estado muy cerca de ver su racha acabada, sin embargo, ha levantado una bola de partido para plantarse en la tercera fase

La gran favorita resucita en París
Iga Swiatek disputando un partido de Roland Garros ante Naomi Osaka - Cordon Press
Francisco SalasFrancisco Salas 3 min lectura

La WTA vive un momento sumamente dulce, sobre todo por el grandísimo estado de forma de sus grandes 'tótems', principalmente Iga Swiatek y Aryna Sabalenka, que pese a su juventud se están erigiendo como las candidatas principales a convertir su rivalidad en dinastía. Pero en París es otra cosa, y es que la polaca ha hecho de la Philippe Chatrier su jardín. Por eso mismo lo de hoy ha sido tremendamente sorprendente, y es que ha estado a las puertas de caer eliminada en segunda ronda, ante toda una ex número 1 y campeona de Grand Slam como Naomi Osaka.

La actual reina del tenis femenino, vio peligrar la hegemonía que inició hace dos años en Roland Garros y tuvo incluso que levantar una bola de partido contra la japonesa, pero acabó imponiéndose por 7-6, 1-6 y 7-5. Fue su decimosexta victoria consecutiva en el Bosque de Bolonia, y sin duda la más sufrida para una jugadora que se había acostumbrado a dominar un torneo en el que su última derrota se remonta a los cuartos de final de 2021 contra la griega Maria Sakkari.Aquel año, Osaka llegó a París con su cuarto Grand Slam recién conquistado en Australia y con unas expectativas tan altas que acabaron por afectarle mentalmente y la llevaron a abandonar antes de la tercera ronda y después de haberse negado a comparecer ante la prensa. Comenzó ahí una travesía del desierto que la sumergió en el ránking y que se prolongó cuando en 2023 dio a luz a una niña, lo que la alejó de las canchas. Su regreso en 2024 fue laborioso, los resultados tardaron en aparecer, pero en Roma alcanzó los octavos de final que sonaban a una mejoría de su rendimiento.

Superó en tres sets la primera ronda en Roland Garros y contra Swiatek, intratable en esa superficie, tuvo contra las cuerdas a una jugadora que venía con los títulos de Madrid y Roma. Pero la polaca supo dominar los nervios. Osaka dispuso de una bola para ponerse 5-1 y con el 5-3 tuvo una bola de partido, que no supo aprovechar. Se aferró al encuentro, salvó su servicio y, en el décimo juego arrebató el de su rival para colocarse en situación de sacar para ganar, una oportunidad que la actual número 1 del mundo no dejó escapar. Lo mejor para ella es que por delante tiene un horizonte asequible, ya que su próxima rival saldrá del duelo entre la croata Jana Fett, rescatada de la fase previa, y la checa Marie Bouzkova, que dio la sorpresa en primera ronda derrotando a la rusa Veronika Kudermetova, favorita 29.