Alejandro Sáez4 min lecturaPrácticamente todo el mundo sueña con una final entre Carlos Alcaraz y Novak Djokovic en el US Open. Pero a la espera de ver si eso se concreta, el español y el serbio parecen estar viviendo un 'duelo' diferente con el micrófono en lugar de con la raqueta en la mano. Tras derrotar este martes al estadounidense Taylor Fritz (9) en los cuartos de final, Djokovic (2) habló sobre la pista y se atrevió a cantar el tema '(You Gotta) Fight for Your Right (To Party)' de los Beastie Boys.
El de Belgrado se arrancó con esa canción después de reflexionar sobre las duras condiciones en el Arthur Ashe Stadium por el intenso calor en Nueva York (33 grados, 50 % de humedad y sensación térmica de 37 grados). "No es fácil (jugar en esas condiciones), pero 'tienes que luchar', como dice la canción que hemos escuchado hace cinco minutos, 'por tu derecho a la fiesta'", señaló en referencia a esa canción de los Beastie Boys que había sonado en uno de los parones del partido. Acto seguido, Djokovic agarró de nuevo el micrófono y pidió a la grada que cantara junto a él el estribillo de su tema.
No fue ese, sin embargo, el único momento llamativo que protagonizó Djokovic sobre la pista. El serbio se ha preparado mentalmente como el principal enemigo del tenis estadounidense, ya que se ha convertido en el rival directo de los tenistas anfitriones por un lugar en la final. Tan solo experimentó un breve momento de tensión debido a un punto perdido con pelota de 'break' en el tercer set, que fue más equilibrado. En ese momento, alguien desde la grada gritó "out" cuando la pelota de Fritz realmente había entrado. Desconcertado, Djokovic devolvió la pelota de manera pasiva, cediendo la iniciativa a su oponente, quien no desaprovechó la oportunidad. Esto desató la furia de Djokovic, que se enfadó con un marcador 4-3 a su favor y el saque de su lado. De repente, sin embargo, se encontró empatado 4-4. "Sabes que aquí el público habla y se mueve, especialmente en las sesiones nocturnas. A veces reaccionas, aunque en su mayoría no sea así, porque debes estar preparado para esto", explicó el serbio en rueda de prensa, donde añadió: "En esos momentos cruciales, cuando te enfrentas a un punto de quiebre y algo te molesta o distrae de repente bajo una gran presión, reaccionas".
Djokovic buscó a la persona que lo había molestado y se dirigió hacia esa área, haciendo gestos para que alguien abandonara el lugar, aunque no identificó al individuo en cuestión. La situación tenía su ironía, ya que el grito había provenido de un área ocupada por amigos de Djokovic, a quienes pidió ayuda gestual para que expulsaran al aficionado en cuestión: "Sí, me molestó, sí (risas). Estaba en un palco donde se encontraban algunos de mis amigos. No sé quién era el chico, pero en ese momento me sentí bastante molesto. Me estaba comunicando con mis amigos porque quería hablar con él".En cuestión de segundos, Djokovic puso al espectador bajo sospecha. Sus amigos, como se pudo observar en las cámaras de televisión, mostraron sorpresa pero no señalaron a nadie en particular. Djokovic finalmente logró calmarse y cerrar la victoria.