Fernando Ruiz3 min lecturaA lo largo de la historia del tenis son muchos los partidos memorables que han quedado para el recuerdo, muchos de ellos porque parecían interminables, como lo fue el partido más largo hasta hoy en día, el inolvidable John Isner- Nicolas Mahut en Wimbledon 2010, en el que necesitaron nada más y nada menos que 11 horas, seis minutos y 23 segundos para dilucidar el ganador, que acabó siendo el estadounidense después de un quinto set (sin tie break en aquella época) que se llevó por 70 a 68.
Y es que ante de la implantación de los tie breaks en el quinto set los partidos podían alargarse muchísimo ya que uno de los jugadores debía ganar ese último set por dos juegos de diferencia, de ahí que finalmente se decidiera a cambiar la regla para acabar imponiendo también el tie break en el quinto set.
Sin embargo, esto no ha impedido que también se vean partidos muy largos, aunque nada comparado con los de antes del cambio.
Para encontrar la muerte súbita más larga no hay que remontarse mucho en el tiempo. Tan sólo a principios de 2024, en pleno Abierto de Australia. Fue en el cuadro femenino y tuvo como protagonistas a la entonces número tres del mundo, Elena Rybakina, y la número 57, Anna Blinkova. La kazaja y la rusa llevaron el partido hasta hasta el último set tras Blinkova el primero por 6-4 y hacer lo propio la rusa en el segundo por 4-6.
En el tercer y definitivo set ambas protagonizaron el tie break más largo con un total de 42 puntos, que finalmente se llevó Blinkova por 22-20. Nada más y nada menos que media hora de tie break en un tercer set que duró hora y media de las dos horas y 46 minutos del total del partido.
Hasta entonces, el récord del tie break más largo de la historia estaba compartido por dos partidos con 15 años de diferencia. El primero de ellos era el Tsonga - Roddick, curiosamente también en el Open de Australia pero en 2007, cuando llevaron el tie brek hasta los 38 puntos. 15 años más tarde, en Wimbledon, Tsurenko y Bogdan también alargaron un tie break hasta los 38 puntos. Ahora, Rybakina y Blinkova pueden presumir de haber disputado el tie break más largo de la historia.