El cartel de Wimbledon, poco a poco, se va quedando sin las viejas glorias. Primero fue Rafa Nadal quien se autodescartó por el hecho de que el cambio de superficie no le vendría bien ni para su futuro ni para los Juegos Olímpicos. Casi al mismo tiempo se produjo Djokovic su enésima lesión en Roland Garros. Y pese a que el serbio nunca descartó su presencia en tierras británicas, realmente lo tiene complicado. Y, por último, Andy Murray ha dicho adiós al tercer Grand Slam de la temporada tras la lesión sufrida en Queen's.
Existían ciertas dudas, pero finalmente el británico se va a perder el que iba a ser su último Wimbledon tras someterse a una operación en la médula espinal como consecuencia de la lesión que sufrió esta semana en tierras inglesas. Según desvela el diario británico The Telegraph, el escocés tendrá que estar seis semanas de baja. Ante tal panorama, se le complica también su posible presencia en los Juegos Olímpicos, que comienzan el próximo 26 de julio.
Cabe recordar que Murray se tuvo que retirar tras cinco juegos en su partido de segunda ronda de Queen's frente a Jordan Thompson, por un problema en la espalda que le inmovilizaba la pierna derecha. El jugador aseguró tras el encuentro que llevaba conviviendo con este dolor desde la gira de tierra batida, pero que aumentó antes del encuentro y que desearía "no haber saltado a la pista".
La lesión, la segunda importante del año tras romperse los ligamentos del tobillo en marzo, provoca que Murray no pueda despedirse de Wimbledon. Pese a que no ha puesto una fecha definitiva para su retirada, el tenista dijo que no planea jugar más allá de verano y que retirarse en Wimbledon o en los Juegos sería "ideal".
Murray es dos veces ganador de Wimbledon, en 2013 y 2016, siendo el primer británico en levantar el título desde Fred Perry en 1936. Además, en estas pistas ganó la medalla de oro para Gran Bretaña en individuales en los Juegos de Londres.
Y mientras el escocés ha dicho adiós, el tenista serbio Novak Djokovic se resiste a decir lo mismo. De hecho, el tenista balcánico ha aumentado el ritmo de su recuperación, tras la artroscopia de rodilla a la que se sometió el 5 de junio, y ya se entrena en pista, al menos para trotar y practicar el servicio.Así se desprende de unas imágenes que ha subido a su cuenta de Instagram, en la que aparece haciendo ejercicios para fortalecer la articulación, sobre una superficie de hierba, y luego en una pista rápida dando una pequeña carrera y sacando, con medias hasta la rodilla. "Tenis, te he echado de menos. Seguimos construyendo día a día", señala en su mensaje.
Tras romperse el menisco de la rodilla derecha y decir adiós en los cuartos de final de Roland Garros, pasó por el quirófano. Ahora, su principal objetivo es estar a punto para disputar los Juegos Olímpicos de París, que comienzan el 26 de julio, pero no descarta competir en Wimbledon.