El inicio de la temporada de Carlos Alcaraz no ha sido todo lo buena que esperaba, pues entre ceja y ceja solo tenía un objetivo, ganar el Open de Australia, pero no ha podido ser. Un excelso Novak Djokovic acabó con su camino en un partido memorable en el que el español estaba siendo muy superior hasta que una desconexión le sacó del mismo y acabó cediendo en cuatro sets. Un duro palo que además ha hecho que Jannik Sinner se encarame aún más al número 1 de la ATP tras levantar el título. Pero no hay tiempo que perder y Alcaraz ya está pensando en lo que le viene por delante.
Ya asentado en su retorno a España tras descansar unos días en casa, el de El Palmar ha vuelto a la pista. Tiene trabajo por delante, porque tal y como se cansó de decir en Melbourne, sigue probando detalles y terminando de pulir el nuevo saque o adaptarse a un estilo de juego algo más potente. Lo tiene controlado, pero aún hay aspectos que fallan. Además, de que este año ha cambiado su calendario y le queda poco tiempo para jugar de nuevo.
Tras años marchándose a Sudamérica, esta vez ha decidido quedarse más cerca y va a jugar, a partir del próximo sábado, el torneo de Rotterdam, donde además será el primer favorito 1 tras la baja de Sinner. La oportunidad de coger ritmo de juego y sumar horas en pista es perfecta, además del golpe anímico muy importante que significaría ganar. Este año desde la gira americana en adelante defiende muchos puntos y no está en una posición cómoda como para seguir bajando puestos en el ranking, por lo que debe cumplir y ganar todo lo que pueda.
Con la victoria de su gran rival en Australia cada vez le queda menos ventaja en lo que a grandes se refiere, pero lo que queda claro es que Sinner y él son los grandes exponentes del tenis de cara a los siguientes años. De hecho, una leyenda del tenis italiano como Nicola Pietrangeli ha confesado en una entrevista a la Gazzetta Dello Sport que ve al murciano como el único capaz de ganar al de San Cándido. "El único rival que puede vencer a Sinner es Alcaraz, el resto son actores secundarios". Y es que ve demasiado superior a su compatriota si está en forma: “cuando juega así es imbatible, sólo perdería si está enfermo o ha dormido mal”.