En pleno debate sobre el calendario del tenis en una semana en la que las estrellas han priorizado un torneo de exhibición como la Laver Cup 2024 a jugar alguno de los ATP 250 se están disputando esta semana en el circuito o a descansar, Carlos Alcaraz y Alex Zverev han dejado su opinión al respecto. Y, en este sentido, el tenista murciano ha respondido a los que le señalan por quejarse del calendario y después jugar en Berlín o en Arabia Saudí en octubre.
"Ha sido una temporada dura, he jugado menos torneos que otros jugadores, pero muchos partidos. He experimentado cosas nuevas como estar lesionado y volver al circuito después. Las temporadas se hacen largas física y mentalmente, y estos torneos -la Laver Cup- me hacen volver a sentirme yo mismo en pista", advierte Carlos Alcaraz, quien asegura haber cogido fuerzas para los dos meses de competición que aún quedan. "Quedan pocos compromisos hasta final de año, pero estoy con muchas ganas por poco a poco ir sintiéndome mejor", destaca.
"Después de la gira americana, estos torneos de equipo como la Copa Davis o la Laver Cup me han venido muy bien para recuperar confianza. Estar con los compañeros es una experiencia única y ayuda mucho. Por ejemplo, yo siempre miro a mi equipo después de casi cada punto, pues el hecho de aquí mirar a Borg o al resto de compañeros me está ayudando y es bueno para mí. Estoy aprendiendo mucho de ellos y un capitán como Bjorn Borg es un gran soporte para mí, me dice en todo momento las tácticas y un torneo así es una experiencia única", añade.
Hasta ahí, el murciano se mostraba tranquilo y explicaba el porqué de su decisión de jugar la Laver Cup 2024, pero cuando le preguntaban por el calendario se encendía. "Muchos creen que éste es un calendario que está bien, pero otros pensamos que hay muchos torneos obligatorios y probablemente vendrán años con aún más. En cierto modo, nos están matando. Ahora hay muchos lesionados por el calendario y otras cosas, pero en algún momento habrá jugadores que se tengan que saltar torneos porque tienen que cuidar su cuerpo, su familia y otra vida aparte del tenis", advertía el tenista español.
Alexander Zverev era más contundente si cabe y culpaba a la ATP de priorizar el negocio sobre la salud y sobre los jugadores, que son los que ponen el espectáculo. "No existe ningún deporte en el que se juegue tanto, esto no puede seguir así. Se está poniendo en riesgo la salud de los jugadores. Es inconcebible que empecemos una temporada el 29 de diciembre y la acabemos en la segunda semana de noviembre. (...) Todo es cuestión de dinero aquí y es lo único que le importa a la ATP. Los jugadores no tenemos ningún poder de decisión", se quejaba el alemán, quien argumentaba que hacer un boicot sólo les serviría para perder dinero y que nada cambiase.