Alvaro Arenillas3 min lecturaNo ha podido ser. Carlos Alcaraz llegó con toda la ambición del mundo al Open de Australia, pero su recorrido en el primer Grand Slam del año 2024 ha terminado en cuartos de final, ronda en la que se ha visto superado por el alemán Alexander Zverev en cuatro sets (6-1, 6-3, 6-7 y 6-4).
El tenista murciano empezó bastante por debajo de su rival en cuanto a ritmo y acierto; tanto es así que parecía que todo terminaría en tres mangas, sobre todo al ver a Zverev ponerse 5-2 arriba en el tercero. Sin embargo, Alcaraz sacó fuerza de flaquezas, forzó el tie break, lo ganó y obligó a que se jugase un cuarto set. En este, el decisivo a la postre, perdió su servicio cuando el marcador reflejaba 4-4 y su rival no perdonó al saque.
"He jugado uno de los mejores jugadores del mundo, ha ganado dos Grand Slams. Cuando vas 5-2, muy cerca de ganar, empiezas a pensar. Estoy feliz con que finalmente lo pude cerrar", comentó el germano nada más acabar el choque que le mete en semifinales del torneo oceánico, donde se enfrentará al ruso Daniil Medvedev.
Vás allá del buen juego de Zverev, que es innegable, durante el partido se vio un espesor impropio en el alegre tenis de Alcaraz, el cual le condenó a cometer más errores no forzados de lo normal en un inicio en el que el teutón dejó a la Rod Laver atónita con su poderoso primer servicio. El sexto cabeza de serie necesitó menos de media hora para apuntarse una primera manga (6-1) y en la segunda supo sobreponerse a la reacción del español, que llegó a ponerse 3-2 arriba en tal parcial.
Cuando parecía que Alcaraz definitivamente arrancaría, las dudas regresaron después de que el vigente campeón de Wimbledon fuera incapaz de aprovechar un 0-40 con el servicio del alemán. Zverev se apuntó el segundo set por 6-3 y, con un acierto con primeros del 90%, además de escudar su juego de fondo con tiros del mejor nivel que desesperaron al murciano.
Si tras dos sets el partido parecía decantado, ver a Zverev 5-2 arriba en el tercero parecía definitivo, pero justo ahí sacó el orgullo Carlos para forzar el tie-break y llevar el encuentro al cuarto parcial. Este, el definitivo, estuvo igualado hasta el 4-4, pero justo ahí fue el alemán quien dio el golpe definitivo al conseguir el break y ser capaz de mantener su servicio en el juego definitivo.
Como decíamos, el alemán se enfrentará en la siguiente ronda (semifinales) al ruso Daniil Medvedev (3), después de que este se impusiera al polaco Hubert Hurkacz en cinco sets.