Antonio José Medina4 min lecturaLa rivalidad entre Carlos Alcaraz y Jannik Sinner amenaza con convertirse en legendaria. El tiempo dirá si será un nuevo Nadal-Federer, pero de momento ya ha deparado diez enfrentamientos en el circuito, alguna final, como la de Pekín hace algunas semanas, o la final del reciente Six Kings Slam, aunque esa no entrará en las estadísticas oficiales. Incluso hubo otro duelo cuando empezaban, en el circuito Challenger ATP, que este organismo tampoco incluye.
Alcaraz fue más precoz en su explosión, pero Jannik Sinner ha ido creciendo a lo largo del último año hasta acabar dominando completamente el circuito. Sólo las genialidades del murciano, que le ha ganado los tres duelos oficiales de 2024, han impedido que el dominio del italiano fuera abrumador. Pero cada partido que pasa, Sinner opone más 'resistencia' y, según ha reconocido, en su mejoría tiene mucho que ver el nivel de Alcaraz.
"Me despierto por la mañana tratando de descubrir cómo vencerlo. Este tipo de rivalidad nos lleva al límite y más allá del 100 %", señalaba el italiano nada más ganarle al español en Riad. "La razón por la que vinimos aquí fue para mostrarles a todos lo que significa el tenis. A veces puede ser una batalla larga como la de hoy, pero hacemos nuestro mejor esfuerzo. Espero que el público se haya divertido", afirmaba el de San Candido.
Su visión de este duelo coincide con la de Carlos Alcaraz, quien da la impresión de que su evolución es más lenta, debido a lo rápido que llegó, pero que no ha parado de crecer en un año complicado, en el que ha tenido varias lesiones. "Todos nuestros partidos son muy complicados. Siempre son dos sets muy duros o tres-cinco sets. Siempre son encuentros muy igualados. Me lleva al límite y sé que tengo que sacar mi mejor tenis si quiero ganarle. Como tenista, me encantan este tipo de batallas, pero, a veces, prefiero que sea más sencillo. Él me hace mejor jugador", afirmaba e español.
Curiosamente, ambos se llevan muy bien y no han dudado, incluso, en compartir entrenamientos y duelos de pretemporada, como el que jugaron el pasado año en Villena. Tras acabar la final de Pekín, viajaron en el mismo avión privado a Shanghai. Y siempre han tenido palabras mutuas de cariño y elogio.
"Espero que esta rivalidad mejore a lo largo de los años. Quiero decir que estoy muy agradecido de tenerle en el circuito. Gracias a él llego hasta mis límites para mejorar, dando mi 100% cada día. Siempre es un placer compartir la pista con él, aunque a veces es complicado disfrutar", reconocía Carlos Alcaraz.
Jannik Sinner opina de forma parecida y espera que nada cambie pese a que su rivalidad puede crecer en los próximos años. "Entre Carlos y yo nos entendemos. Viajamos mucho y somos buenos amigos. Nos gusta compartir campo cada vez que nos enfrentamos e intentar divertirnos lo máximo posible. Cada partido entre nosotros es muy bueno. Espero que esta rivalidad dure el mayor tiempo posible, pero hay muchos otros jugadores que pueden tomar el relevo. Veamos qué pasará en el futuro", afirma el italiano.