El mundo se rinde a Carlos Alcaraz después de su gran gesta en la Final de Roland Garros frente a Alexander Zverev. Los sueños a veces pueden convertirse en realidad y en las horas hemos podido ver el deseo de aquel niño que veía junto a su padre frente a la Torre Eiffel los partidos de este tan prestigioso torneo. El murciano vuelve a reinar después de haber pasado por momentos difíciles este año y ya hay quien le compara con los más grandes del tenis.
Carlos Alcaraz ha repasado cómo se siente realmente tras conquistar Roland Garros en una entrevista para los compañeros de Marca. El tenista español contó varios detalles de la celebración tras alzarse con la ensaladera. “Lo celebré con mi familia, con la gente que vino de Murcia, con mis amigos. Fuimos a cenar e hice todo lo que no estaba haciendo durante el torneo. Comí lo que no estaba comiendo por el tema del gluten y demás. Solté el pie del acelerador y me dejé llevar un poco”, contaba Carlitos.
Lo dicho, con esta gesta Carlos Alcaraz ya se compara con los más grandes, aunque aún está lejos de la veintena que aguarda en las vitrinas del ‘Big Three’. Aun así, el murciano ha querido mandar un mensaje firme: “He visto vídeos, pero con unos 'highlights' no me puedo comparar a ellos cuando tenían mi edad. Como siempre he dicho, no importa lo que haya conseguido con 21 años si me estanco aquí. A final, yo quiero seguir mi carrera y seguir creciendo para llegar donde están Djokovic, Rafa y Federer hasta hace poco. Los buenos y los cracks han seguido mejorando durante su carrera hasta llegar a los 37-38 años en su mejor momento”.
Ha conseguido alzarse en París después de llegar con algunas dudas tras su lesión en su antebrazo derecho, que le había impedido participar el algunos torneos y a retirarse de otros tanto. Existía cierta preocupación en Roland Garros, pero lo cierto es que su recuperación ha respondido a la perfección. “En Madrid me lo noté y eran partidos a tres sets. Es verdad que me provocó incertidumbre en el brazo. Conforme iban pasando las rondas aquí no sentía dolor. Y el día de la semifinal con Sinner ya no tenía que cohibirme en pegar las derechas a un 80 o 90 por ciento. Si me rompo o me duele, que sea aquí. No era momento de tener miedo sino confiar en el trabajo que había hecho y olvidarme plenamente de todo”, analizaba.
El objetivo de Carlitos está puesto de nuevo en París, con los Juegos Olímpicos a la vuelta de la esquina, donde será uno de los integrantes de la expedición española junto a Rafa Nadal, con quien compartirá pista en dobles. Aun así, Alcaraz ha querido desvelar cuáles serán sus principales objetivos a corto y a medio plazo: “En principio voy a Queen's, Wimbledon y los Juegos si todo va bien. Si no va bien en la gira de hierba adaptaremos cualquier cosa o hablaré con el equipo a ver qué hacemos”.