Francisco Salas3 min lecturaCon 17 años no es muy común llegar a la cima de un deporte, pero en el tenis ha sido siempre relativamente común que gente muy joven y con un talento sobrenatural lleguen a la cima y demuestren que están llamados a dominar el deporte. Este es el caso de Mirra Andreyeva, una joven rusa de 17 años, que hace poco más de uno empezó a aparecer por los cuadros finales de los torneos de la WTA, pero no ha sido hasta este momento, cuando bajo las órdenes de Conchita Martínez ha logrado dar un paso al frente y esta a solo dos partidos de conquistar Roland Garros. Y el pase a semifinales lo ha conseguido a lo grande, ganando en un auténtico partidazo a la número 2 del mundo y vigente campeona del Open de Australia, Aryna Sabalenka.
La rusa de 17 años, protagonizó la gran sorpresa del torneo al derrotar a la bielorrusa, visiblemente disminuida físicamente, por 6-7, 6-4 y 6-4, para alcanzar su primera semifinal de un grande. La de Minks no sabía lo que era perder ni siquiera un set en un gran torneo desde el US Open 2023, y ha venido la joven rusa a conseguirlo. Ambas ya se había enfrentado en el Mutua Madrid Open, pero ahí fue muy diferente, ya que la favorita se impuso con mucha solvencia.
El de esta tarde parisina ha sido un auténtico partidazo, con muchas opciones para ambas, golpes ganadores, momentos de gran tenis y juego de fondo, y en general un ejemplo de lo que ha hecho del tenis femenino uno de los deportes más igualados de los últimos tiempos, y el motivo de su tremendo crecimiento. Además, lo de hoy confirma que las Swiatek, Gauff, la propia Sabalenka, Rybakina y compañía, tiene una nueva compañera en ese grupo de la más absoluta élite.
El partido empezó que con la doble campeona de Grand Slam dominando, y aunque le costó por momentos, consiguió en el desempate cerrar la manga y poner rumbo a otra semifinal, pero la segunda manga fue otra historia, y mientras a las dos les costaba mantener sus saques, llegó Mirra para mantenerlo y llevarse el set. Y en el tercer y definitivo parcial, la que que primero consiguió un break fue la 2 del ranking, pero se lo devolvió la 'niña' muy rápidamente, y en el decisivo décimo juego, cerró el partido al resto. Ahora, la rusa se medirá a la italiana Jasmine Paolini, verduga de Elena Rybakina, por un puesto en la final.