El milagro no ha sido posible, Andy Murray tenía el sueño de despedirse jugando por última vez el cuadro final de Wimbledon, donde la organización ya había adelantado en la previa que iba a recibir un homenaje por sus éxitos, pero no podrá ser. El escocés, último británico en ganar en el All England Tennis Club, tras hacerlo en 2013 y 2016, sufrió una lesión en la espalda en Queen's, jugando la segunda ronda frente a Jordan Thompson, y se operó para quitarse un quiste con el objetivo de estar en la gran cita. Y ha hecho lo imposible por llegar, pero en solo diez días no le ha dado tiempo.
El británico se ha entrenado estos días en las pistas de Wimbledon para tratar de llegar a tiempo al torneo, pero a última hora ha decidido bajarse. Tenía programado un encuentro contra Tomas Machac en la central este martes, pero finalmente no será de la partido. Una despedida agridulce de una grandísima leyenda del tenis, y sin el que sería imposible explicar las últimas dos décadas del mismo. Pero llega a su fin, pues aunque aún no ha puesto fecha definitiva a su retirada, dijo hace meses que no planea jugar más allá de verano y que lo ideal sería despedirse en Wimbledon o en los Juegos Olímpicos.Eso sí, el escocés tendrá un aliciente estas semanas, y es que sí que jugará el torneo de dobles junto a su hermano Jamie, junto al que conquistó, en estas mismas canchas, el oro olímpico de Londres 2012. El equipo de Murray se ha mostrado muy dolido al comunicar la decisión del jugador. "Desafortunadamente, pese a todo el trabajo que ha hecho en su recuperación, Andy ha tomado la difícil decisión de no jugar el torneo individual", eso sí, tendrá la última bala con su hermano, para recibir la ovación del público, al menos "una última vez".
El dúo fraternal vivirá su debut ante una pareja australiana más que contrastada como la que forman Peers y Hijikata, ambos ganadores del Open de Australia. El veterano Peers fue profeta en su tierra en 2017, mientras que el joven Hijikata lo consiguió el año pasado junto a Max Purcell. A favor de los británicos está el mayor conocimiento de la hierba, que se entienden como pocas parejas, y claro está, el apoyo del público, que será una caldera. En todo caso, mucho de esto va a depender del estado de la espalda de Andy.