José Antonio Rivero3 min lecturaCarlos Alcaraz no podrá participar en el Masters 1.000 de Montecarlo, tal y como el propio tenista anunció en sus redes sociales hace unos días. "Tras visitar a mi doctor en Murcia y ser evaluado, no voy a poder ir a Montecarlo a comenzar la gira de tierra. Tengo una artritis postraumática en mi mano izquierda y molestias musculares en columna que necesitan de descanso para afrontar todo lo que está por venir", escribía Alcaraz.
Desde Italia, el extenista y comentarista en 'Eurosport' Guido Monaco abrió el debate sobre los esfuerzos que Alcaraz hace sobre la pista y su forma de competir, lo cual le está generando lesiones musculares de manera continuada. "Alcaraz debe aprender a dosificarse porque si sigue así, acabará con muletas a los 22 años", apuntó Monaco, en unas declaraciones que recoge 'OA Sports'.
"No puede hacer 80 splits (apertura de piernas) por juego, aunque estamos hablando de un atleta muy talentoso... Mencionó un problema con su mano izquierda y la espalda. Le fue bien, después de haber pasado la mitad del torneo en splits, eso es algo que necesita aprender. Djokovic, que tiene un tipo de juego defensivo similar, hace eso solo en ciertas jugadas. Él, en cambio, está exuberante al más alto nivel y se ha expuesto a unas cuantas lesiones de más", siguió diciendo el extenista de 49 años.
Lo cierto es que Carlos Alcaraz no pudo competir en las ATP Finales de la temporada pasada, así como en las finales de la Copa Davis. Este año tampoco pudo estar en el Open de Australia. Se recuperó y logró los títulos de Indian Wells y de Buenos Aires, llegando también a la final en Río de Janeiro y quedándose en semifinales en Miami, de nuevo otra vez con problemas físicos.
La vuelta de Alcaraz se puede esperar para el Conde de Godó, que comenzará justo después de Montecarlo, el próximo 17 de abril, donde además el murciano defiende título.
El tenista español se está recuperando de su lesión en su tierra, en Murcia, donde acudió hace poco a ver y dar ánimos a los participantes del Challenger de su ciudad natal. Alcaraz dejó ver un cambio de look, diciendo adiós a su poblada cabeza para pasar a raparse la parte baja de la misma.