La planificación del
Sevilla FC, como ocurriera el año pasado, ha arrancado pronto. Incluso, antes, porque no fue hasta finales de julio cuando se cerró el traspaso de
Bryan Gil al Tottenham, cifrado en
25 millones de euros, más el pase de
Lamela. Ahora estaba claro que el objetivo serían los dos centrales titulares,
Diego Carlos y Koundé, que ya manejaron ofertas estratosféricas en las dos ventanas anteriores, pero que se quedaron en Nervión con el compromiso de que las que llegaran este verano serían atendidas, dentro de unos márgenes razonables, claro está. Con el brasileño, a quien el
Newcastle le triplicaba el sueldo en enero, se ha negociado rápidamente con el
Aston Villa, que ofrecía un fijo menor que los blanquinegros (
31 millones de euros al cambio, según varias fuentes), pero se han intentado 'rascar' unos
bonus por rendimiento individual y colectivo, además de conseguir que el pago sea mayoritariamente en
efectivo.
Tampoco ha escapado mal el ex del Nantes, con un contrato
superior en cantidades al que habría percibido en St James' Park, aunque por tres temporadas, a falta de confirmación oficial, que debe ser inminente, pues pasó
reconocimiento médico en Birmingham entre el jueves y el viernes, por lo que solamente quedarían los últimos trámites. Y el siguiente, aunque quizás no por la vía rápida al aliviar el Sevilla FC su necesidad de
cuadrar cuentas antes del 30 de junio, debe ser Koundé. El francés, como Diego Carlos, tenía el compromiso por parte de los dirigentes blanquirrojos de que su marcha no sería bloqueada exigiendo la cláusula (
80 millones de euros), a menos que el
Chelsea llegara en los últimos días del mercado veraniego. No tiene pinta, porque,
tras consumarse la venta del club londinense, todo
se acelerará allí.
Según ha podido saber ESTADIO Deportivo, los
nuevos dueños 'blues' no se entrometerán en temas de gestión deportiva, confiando en los planes ya existentes y con el aval de
Thomas Tuchel. Especialmente en el de Koundé, por el que están dispuestos a realizar una fuerte inversión (de
65 kilos mínimo, según las exigencias nervionenses),
respetando las cantidades pactadas y los
cinco años de contrato. Será cuestión de terminar de acordar una tarifa de traspaso que contente a las dos partes, lo que podría dilatarse, como ya se ha explicado, un poco más en el tiempo, aunque no demasiado. Lo que sí parece complicado es que el Sevilla FC pueda repetir la fórmula mágica de fichar a dos centrales de ese nivel por
40 millones en total y venderlos por
casi tres veces más.
Casi todos los que sonaron o están sonando costarían lo mismo que el galo (de 25 kilos para arriba). También otro que encanta a Monchi, pero que, de momento, no es accesible. Se trata de
Merih Demiral (24), del que ya se tenían excelentes informes el verano pasado como posible recambio de Koundé en caso de una ofensiva total del Chelsea. Propiedad de la
Juventus hasta
2024, no tenía sitio en el 'Vecchia Signora', una situación que podría cambiar ahora con la retirada de
Chiellini, aunque con
Bonucci, De Ligt y Rugani, tampoco es indispensable para los turineses. Con todo, habrá que esperar la decisión del Atalanta, donde ha brillado durante su cesión en la 21/22 (
dos goles y tres asistencias en 42 partidos), pues los de Bérgamo tienen una
opción de compra, alta eso sí. De hecho, los 'neroazzurri' desean renegociar esos
27,5 kilos, a lo que se negará la 'Juve'. En ese caso, el precio de salida de Demiral no sería inferior para el Sevilla o los otros pretendientes, sobre todo de la
Premier.