Aunque el objetivo de la
Chanpions League está casi en la mano e, incluso, podría alcanzarse hoy mismo, la tensión en el entorno del
Sevilla FC es palpable y eso también lo transmite un
Julen Lopetegui que trata de abstraerse y centrarse en un partido en el que su equipo va a estar en el punto de mira.
El técnico sevillista analizaba a poco más de 24 horas del choque la dificultad que le espera, cómo se encuentra el equipo tras el palizón de Villarreal y la situación de los lesionados, que vuelven a ser varios antes de estos diez últimos días de competición.
"Esperamos un partico complejo, difícil. En el 2-6 del otro día no tiene nada que ver el resultado con la realidad, yo
espero a un Mallorca como el del partido de Barcelona, en el que están a punto de puntuar en el Camp Nou,
o el de la victoria ante el Atlético. Ese equipo agresivo y con buenos futbolistas que van a querer jugar sus bazas. (...) La derroa ante el Granada puede hacerle más peligroso. El fútbol funciona de otra manera a como creemos y, espero un partido equilibrado, pero confiamos en nuestros futbolistas y que puedan hacer un buen final. Tenemos que estar muy bien preparados mentalmente", señalaba ante todo el técnico del Sevilla del encuentro de mañana, que centra toda su atención en este momento.
"
Nos queda o más difícil en el fútbol -el último paso- y tenemos que centrarnos en ello. Los chicos ya llevan tres años haciendo un trabajo fantástico y
ojalá tengan el premio gordo de conseguir el objetivo. Estos jugadores llevan compitiendo tres temporadas a un nivel muy alto y así queremos terminar. Mañana tendremos un partido exigente, queremos hacer un buen partido y darles una alegría", añadía lopetegui, que no quiere analizar más allá de ahí, "siendo conscientes de la exigencia y el crecimiento del club" les ha llevado a exigir la Champions como algo habitual, no como el premio añadido que hasta hace poco era. "Uno tiene que adaptarse a las circunstancias y dar lo mejor de uno mismo. Espero focalizalo mucho en el presente. Salvo el de mañana no hay otro partido", indicaba.
"Consolidamos ya hace tiempo esa posición de Europa League, en la que muchos grandes equipos querrían estar, pero
la exigencia en la que estamos en el club y el sevillismo hace que miremos con más ambición al objetivo de la Champions, al que vamos a tratar de conseguir llegar. Exigencia que ha hecho que el club crezca y mire a objetivos siguientes. Pero nosotros tenemos que estar centrados en el partido de mañana. Cada partido a estas alturas es una final para todos los equipos. Todo el mundo va al límite y nos tenemos que preparar para eso, para conseguir más", afirmaba.
No obstante es consciente de que el Sevilla ha bajado su rendimiento en este tramo final y, por ello, le está costando cerrar de una vez una clasificación que parecía encarrilada desde hace meses. "Las temporadas duran lo que duran y hay momentos mejores y menos buenos; y hay que saber competir en todos ellos, confiando en nosotros y mirando solo al presente. Las temporadas son largas y tenemos que centrarnos en lo que tenemos bajo nuestro control y eso es el partido de mañana", estimaba Lopetegui, quien se sabe cuestionado por parte de la afición, aunque no quiere pensar en ello. "
No me molesta nada, soy entrenador y estoy expuesto a las palabras de futuro. Mi objetivo es que centrarse en lo que uno puede hacer. Llevamos una regularidad competitiva muy alta en las tres últimas temporadas y ahora estamos luchando en lo que es el objetivo (...) No estoy muy pendiente de las cuestiones que no están bajo mi control. Sí lo está preparar el partido de mañana. Con el club hay una relación que va más allá de lo profesional, de respeto y cariño. Así se ha llegado a este crecimiento durante los tres últimos años y queremos seguir", añadía.
Lopetegui también analizó nombres propios como el de
Ocampos, que hoy no se ha entrenado y que esperará hasta mañana para saber si puede contar con él. "No sabremos hasta mañana si vamos a poder contar con él. No ha podido entrenar y entonces
sabremos si está en mejores condiciones para incproorarse al grupo y ayudarnos", aseguraba el técnico sevillista, que espera recuperar a algunos de los lesionados, especialmente a
Rekik o Suso, antes de que acabe el campeonato. Y que tenía palabras de elogio para un
Martial que lo ha pasado mal en sus meses como sevillista: "Está mejor y espero que pueda jugar antes del final. Anthony, cuando mejor estaba, se lesionó dos veces y no pudo tener una continuidad. Esa disciontunuidad no le ha permitido ayudarnos.
Ojalá podamos verlo en este final de Liga y nos pueda ayudar", afirmaba el guipuzcoano, que no quiere hablar ahora de la continuidad de Martial en el Sevilla.
Por último, tuvo palabras de elogio hacia una afición de la que, una vez más, espera lo mejor. "Sólo hay una palabra que es presente. Estamos convencidos de que el ambiente del estadio nos va a ayudar y nos dé esa energía extra que nos dé nuestro objetivo. (...)
Pedirles lo que nos dan siempre, que sean conscientes de que una parte importante de lo que ha conseguido este club en estos años es por ellos y esa exigencia en los momentos complejos nos hace ser más competitivos. Ese aliento extra en momentos puntuales seguro que lo vamos a tener mañana, no tengo duda", concluía.