El director deportivo del Sevilla FC, Monchi, se ha ganado a base de resultados ser considerado por muchos como el mejor en su puesto del fútbol mundial. La confianza en su modelo por parte del club permitió a un equipo recién ascendido de Segunda y que apenas aparecía, en mejores años, por las seis primeras posiciones de la tabla a hacerse un habitual en Europa, estar en el
Top-10 del ranking UEFA y entre los 21 clubes más ricos del mundo.Pero eso tiene su precio y cómo él mismo admite en una entrevista con Radio Marca, ahora mismo no es tan 'fácil' ni tan barato fichar como antes. Los clubes ya le conocen y no se lo ponen cómodo y eso le ha obligado a cambiar de estrategia. "
Este Sevilla no es el de hace diez años. Ya nos conocen. Saben que buscamos jugadores que tienen una segunda venta y los clubes quieren participar de estas ventajas. El perfil que buscamos ahora es un jugador más final, más terminado y tiene un precio mayor. No vamos por el Daniel Alves, el Adriano o el Baptista de turno y eso influye en el coste", asegura el León de San Fernando.
Como bien dice, ya no se busca tanto el 'milagro' y si aprovechar, con las limitaciones que tiene el Sevilla con respecto a los clubes de la Premier y a los poderosos del fútbol mundial, esas gangas que pocos ven y que él ha podido sacar a un coste asumible para la entidad.
Los nombres de Martial, Tecatito, Delaney, Lamela, Montiel, Augustinsson, Papu Gómez... la mayoría de sus últimos fichajes,
ya son futbolistas con una trayectoria y reconocidos a nivel mundial, a los que el equipo de Nervión ha podido acceder por una u otra circunstancia.
"Nuestro crecimiento se ha basado en la generación de plusvalías que nos ha permitido reinvertirlas", señalaba en referencia a la política que permitió al equipo crecer, algo que ha cambiado: "Pero
el Sevilla ha evolucionado y se le exigen resultados inmediatos. Ahora, un 30 por ciento de los fichajes serían jugadores que llegan y están preparados para competir y el 70 son jóvenes o vienen de campeonatos inferiores. No tiene que ver con la edad. Por ejemplo Diego Carlos venía del Nantes, de no competir en Europa y necesitaba adaptación. Papu sabes que va a llegar y va a competir.
Escudé vino y estaba prácticamente apartado del Ajax, Kanouté era suplente de Mido en el Tottenham, Banega daba vueltas a un campo apartado en el Valencia.... Son situaciones extrañas en las que confiamos en nuestras posibilidades de darle la vuelta. El seguimiento no es de la última semana, lo hacemos con mucho tiempo de antelación", advertía Monchi.
Por eso, ahora, sorprende incluso más. Ya no se está pendiente de la promoesa o del jugador desconocido que va a traer sino de qué futbolista reconocido ha podido hacerse, por qué ha llegado a esa situación y si puede cuajar en el Sevilla. "Antes de la llamada telefónica intentamos hacer un perfil psicológico del jugador basado en informaciones de jugadores que lo conocen, que han convivido con él, las redes sociales, etc. Luego, en la conversación con él, intentas percibir cómo es.
Para mí es fundamental que al jugador, cuando escuche Sevilla FC, se le iluminen los ojos", añadía.
Pero para lograrlo también necesita mostrarle un proyecto ganador y alicientes competitivos. Y ahí, la presencia en la Champions League es fundamental. Y no sólo en lo económico. "Para los planes de crecimiento del club, clasificarse de forma continuada para la Champions es objetivo prioritario.
Estamos en una situación buena, pero Villarreal, Real Sociedad y Betis están ahí peleando, más el Atlético y el Barça que ya los tenemos encima. Si nos metemos, batiríamos un récord en la entidad", afirmaba el director deportivo del Sevilla, conocedor que ya el pasado año se logró por primera vez clasificarse dos años seguidos, vía Liga, para la máxima competición de clubes. Una tercera vez sería algo histórico.
Pero le quedan nueve finales, visitar próximamente al Barça, recibir al Real Madrid en pocas semanas... Y sigue contando con muchos lesionados. De hecho, esta semana Julen Lopetegui sólo dispone de seis jugadores para empezar a preparar la visita al Camp Nou. "Leía estos días atrás que, en el Clásico, el Madrid acusó las bajas de Mendy y Benzema. Son dos jugadores y nosotros
llevamos una media de ocho o nueve bajas desde el 28 de diciembre. El espíritu combativo de esta plantilla hace que parezca que no ha habido lesionados. Como dice el lema, no nos rendimos y seguimos en la lucha", estimaba. Falta le va a hacer. Le queda lo más difícil.