El Gobierno británico anunciaba esta mañana que ha congelado los activos del oligarca ruso
Roman Abramovich, dueño del
Chelsea, por la "estrecha relación" que ha mantenido con el régimen ruso "durante décadas". Junto a otros siete oligarcas de su país, a los que impone sanciones por sus vínculos con el
presidente ruso,
Vladímir Putin, el club del que aún es dueño el magnate exsoviético se veía directamente implicado en la
guerra entre Rusia y Ucrania.El hecho de que Abramovich anunciara nada más iniciarse la invasión de Ucrania que el club londinense pasaría a llevarlo su Fundación y, posteriormente, que estaba en venta no han evitado la sanción. De momento, la Premier League advertía que eso no influirá inmediatamente en lo deportivo y que el partido entre el
Norwich y el Chelsea de este jueves se disputará tal como estaba previsto. De hecho, el club tendrá una licencia especial para seguir compitiendo hasta final de temporada.
Pero sí tendrá duras consecuencias que le afectarán en el presente y, sobre todo, en un futuro inmediato. La sanción impuesta por el Gobierno británico no permitirá al Chelsea llenar su estadio, ni vender o comprar jugadores, ni renovar a futbolistas como Antonio Rüdiger o Azpilicueta, ni completar la venta del club a uno de los diez magnates que lo acechaban en las últimas semanas.
Las prisas que el ruso Roman Abramovich tenía para deshacerse del club no eran una exageración. El Reino Unido ha congelado sus activos y le impide realizar negocios con ciudadanos del país. Eso implica que el Chelsea no podrá recoger beneficios de ninguna transacción.
Y tampoco podrá entrar en la puja por
Jules Koundé (Sevilla FC) pese a que perderá en defensa a los mencionados Rüdiger o Azpilicueta, además de al danés Christensen, que cada vez suena con más fuerza para el Barça. la renovación in extremis de Thiago Silva hace dos meses le ha salvado de una hecatombe.
Eso también hace que clubes como el
Real Madrid, que no parecían poder competir por su fichaje, vuelvan a aparecer en escena. Varios son los medios que sitúan al club blanco en la puja por el internacional francés del Sevilla en los últimos días.
Sin embargo, el hecho de que su principal valedor, Thomas Tuchel y su Chelsea, se vayan a caer de ella hace bajar su cotización.
Una mala noticia para un Monchi y para un Sevilla FC que tendrán difícil volver retener a Koundé aunque nadie llegue a los 70-80 millones que pretenden sacar por él.