El estelar debut del brasileño Phillipe Coutinho con el Aston Villa, tras su salida del FC Barcelona por la puerta de atrás, reactivó decisivamente al conjunto de Steven Gerrard que evitó la derrota
(2-2) ante un Manchester United que no pudo reencontrarse con el triunfo a pesar de tener dos goles de ventaja.
Coutinho fue determinante con un gol y una asistencia, pero lo verdaderamente relevante vino después cuando Ralf Rangnick y Anthony Martial se pelearon en público evidenciando aún más la grave situación que se vive en el vestuario rojo.
Rangnick, técnico del United, no pudo encauzar su situación de su equipo tras la derrota ante el Wolverhampton y volvió a pinchar.
Sin Cristiano Ronaldo, lesionado, fue Bruno Fernandes el que asumió el liderazgo de los 'Reds Devils'
con Cavani como '9'. Sin embargo, el entrenador germano tuvo que explicar por qué no contó con Martial, que
sigue presionando para salir en este mercado de enero a Sevilla FC o FC Barcelona y que se volvió a quedar fuera de la lista.
La respuesta del alemán fue contundente y acusó al francés de no querer jugar para forzar así su salida. "Anthony Martial no quería estar con el equipo. Por mi parte habría estado con total normalidad, pero él no quería y esa fue la razón por la que no viajó con nosotros a Birmingham", espetó en rueda de prensa ante las críticas. El empate no sirve al United, que acumula dos encuentros sin ganar y sigue fuera de los puestos europeos.
La réplica del atacante galo no se hizo esperar y llegó vía Twitter. "Nunca me he negado a jugar un partido con el Manchester United. Llevo siete años aquí y nunca he faltado el respeto, ni se lo faltaré jamás, al club ni a la afición", respondió elevando las hostilidades y dejando claro que el club inglés va a tener un grave problema en su vestuario si Martial se queda hasta final de temporada.
Cabe recordar que
el Sevilla FC había convencido al jugador, pero las posturas con el United estaban tan alejadas que comenzó a explorar otras alternativas para reforzar su ataque en este mercado de fichajes de enero. El club nervionense ofrecía hacerse cargo de una parte proporcional de la mitad de la ficha que le resta por cobrar tras llevar seis meses en Old Trafford. Sin embargo,
los británicos exigen hacerse cargo del salario íntegro y abonar una cantidad como compensación por la cesión. Así se lo hizo saber a Monchi y también al Barça, otro de los grandes interesados en hacerse con Martial.