El
Sevilla FC y su ya exfutbolista
Joris Gnagnon se han citado a finales de este mes para
verse las caras en los juzgados de la capital andaluza para dirimir sus cuitas económicas después de que la entidad nervionense acordase rescindir el contrato del denostado defensor francés de manera unilateral y alegando una
falta de profesionalidad que entiende demostrada de manera manifiesta, ya que el último encuentro oficial del galo fue antes de la pandemia y en este tiempo ha hecho gala de una
deficiente forma física.
El club sevillista comunicó el pasado 20 de septiembre que rompía el contrato de Gnagnon, que hasta ese momento venía ejercitándose en la ciudad deportiva
sin ficha federativa para ninguna de las competiciones en liza, al igual que su compatriota
Ibrahim Amadou, quien sigue en esta situación. Al que fuera prometedor canterano del Rennes le quedaban aún por cumplir dos años más de una vinculación
hasta junio de 2023 pactada en su ruinoso fichaje por 15 millones de euros en el verano de de 2018.
Traspaso caro, ficha alta y, para rematar la jugada, un contrato largo de cinco años. Decir que su rendimiento no estuvo a la altura de su contrato es ser demasiado indulgente. Comentados
problemas con la báscula, una total falta de
implicación y de
disciplina, así como su incapacidad para asumir los conceptos del entrenador, Julen Lopetegui, fueron los motivos de que el Sevilla optase por decir 'Basta' y alegar antes las autoridades laborales lo que entiende que es un
despido procedente. No está de acuerdo el jugador, que como es lógico puso el caso en manos de sus abogados para tratar de
cobrar íntegras las fichas de estos dos ejercicios que tenía firmados.
Un dato curioso es que, aunque el juicio no se ha celebrado aún, el Sevilla FC ya ha presupuestado este gasto. No en vano, entre los muchos datos ofrecidos durante la
Junta General de Accionistas del pasado 26 de octubre, el director general de la entidad,
José María Cruz, reveló que la rescisión unilateral de los dos años de contrato que aún le quedaban por cumplir al central francés ha supuesto una merma en las arcas de la entidad de
2,7 millones de euros. De ello se deducía que el club le había tenido que pagar a Gnagnon los dos cursos, ya que tenía un salario de
1,4 millones por temporada.
Según informa
Diario de Sevilla, el primer acto de conciliación entre Gnagnon y el Sevilla FC se celebrará el próximo
30 de noviembre, después de que se aplazase la primera cita, fijada inicialmente para el pasado miércoles día 10, debido a que los abogados del futbolista francés presentaron un escrito para justificar que no podía viajar hasta la capital de Andalucía y solitar un aplazamiento concedido por la autoridad competente. El jugador, de
sólo 24 años, se encuentra libre y buscará equipo en el próximo mercado invernal de fichajes.
Aitor Torvisco4 min lectura